El gobernador de Florida, Ron DeSantis, anunció este lunes 9-M que declaró en estado de emergencia sanitaria al estado sureño, donde hasta ahora se han registrado dos muertes por el coronavirus.

 

La medida tiene como objetivo facilitar las compras de productos para combatir la enfermedad y contratar personal con ese mismo fin fuera del estado.

 

“El mensaje general en términos de lo que estamos viendo es que este es un virus que para la gran, gran mayoría de la población no va a significar complicaciones graves de salud», dijo DeSantis, para añadir que las personas mayores y las que tienen problemas de salud graves son las que están en mayor riesgo de sufrir consecuencias negativas e incluso la muerte.

 

El anuncio fue hecho en una rueda de prensa en Tallahassee, la capital del estado, donde hoy la Cámara de Representantes del Congreso estatal suspendió sus sesiones sin previo aviso porque cinco legisladores decidieron hacerse los análisis para determinar si han estado expuestos al coronavirus.

 

Según el portavoz de la cámara, José Oliva, los cinco legisladores y algunos de sus ayudantes asistieron hace diez días en Washington a una reunión en la que había una persona que posteriormente dio positivo a la enfermedad cuando fue sometido a la prueba.

 

Los cinco legisladores, Anthony Sabatini, Thad Altman, Kionne McGhee, Byron Donalds y Cord Byrd, todos republicanos, menos el tercero, que es demócrata, junto con sus ayudantes, acordaron hacerse las pruebas y permanecer aislados hasta que se conozcan los resultados.

 

Ninguno de ellos presenta síntomas de COVID-19 y ninguno ha estado en contacto directo con la persona que dio positivo, dijo Oliva.

 

El Departamento de Salud de Florida rectificó este lunes una recomendación que había hecho previamente en la que se pedía a todos los residentes en el estado que hubieran viajado al extranjero que se mantuvieran en aislamiento por 14 días.

 

Después se precisó que solo los que hubieran regresado de países de alto riesgo eran los que debían tomar dicha medida.

 

Las autoridades sanitarias prohibieron a un segundo crucero de Princess Cruises atracar en el puerto Everglades, en Fort Lauderdale (Florida), hasta que no se determine que dos miembros de la tripulación están libres de coronavirus, informaron medios locales.

 

El barco está realizando desde el pasado 1 de marzo un crucero por el canal de Panamá, Costa Rica y el Caribe que está previsto que finalice este miércoles en Port Everglades, donde zarpó.

 

Dos de los tripulantes a bordo trabajaron antes en cruceros donde se produjo algún caso de coronavirus, razón por la cual deben someterse a las pruebas para detectar si están infectados por exigencia de los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de EE UU.

 

El domingo, otro barco de la misma compañía, el Regal Princess, no pudo atracar en Port Everglades hasta que no se hizo las pruebas a dos tripulantes que podían haber estado expuestos al coronaviurs.

 

Doce personas han dado positivo en los análisis de coronavirus realizados en Florida y hay otros cinco floridanos diagnosticados en otros estados, además de un californiano diagnosticado aquí, que permanece en aislamiento, según el Departamento de Salud.

 

La Organización Mundial de la Salud (OMS) dijo que se han registrado 109.578 casos confirmados de coronavirus en el mundo, de los cuales 3.994 corresponden a las últimas 24 horas.

 

En el caso de EE.UU., de acuerdo con los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC), se contabilizan más de 420 casos confirmados y 19 muertes.

 

(Panorama/EFE)