Este domingo 12 de abril, domingo de Resurrección, el papa Francisco pidió en su Mensaje Pascual y la bendición Urbi et Orbi por el levantamiento de sanciones impuestas por el régimen gringo a países como Venezuela, así como por la condonación de deudas a los países pobres que se han visto más afectados por la pandemia de coronavirus.
El sumo pontífice señaló que, «considerando las circunstancias», las sanciones deben suspenderse para que los países perjudicados puedan ofrecer ayudas a sus ciudadanos que padezcan el covid-19. En este sentido, hizo especial mención a Venezuela para que las medidas coercitivas a las que el país ha sido sometido no impidan que la población reciba ayuda internacional.
Francisco también pidió especial atención a las regiones más pobres de Asia y África, donde es grave la situación con refugiados y desplazados por guerras, sequías y carestía. En cuanto a Europa, el llamado fue para que países de la región estén a la altura del «desafío histórico» que la coyuntura por coronavirus significa para el mundo.
El mensaje fue emitido desde el interior de la basílica de San Pedro a puertas cerradas sin concurrencia. Este año no pronunció su discurso desde el balcón de la logia central debido a que la plaza está cerrada al público por medidas sanitarias. En Italia hubo una segunda oleada de contagios y decesos, mientras que EEUU sigue siendo el epicentro de la pandemia.
(LaIguana.TV)
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