Reclusos de la cárcel judicial de Neiva, en el departamento colombiano de Huila, se levantaron en huelga de hambre este domingo y, al mismo tiempo, incendiaron colchonetas y otros enseres dentro del centro penitenciario.

 

Las acciones se iniciaron como medida de protesta ante la falta de elementos de protección y planes de contingencia para evitar el contagio por coronavirus dentro de la prisión, reseñó Blu Radio.

 

Además, piden que se acelere el decreto sobre excarcelaciones, que se anunció hace varias semanas, para dejar en libertad o enviar a prisión domiciliaria a muchos de los detenidos, mientras se mantenga la emergencia nacional por la pandemia.

 

El personero municipal (representante del Ministerio Público), Kleiver Oviedo Farfán, dijo: «ellos insisten en que se hagan efectivas las medidas transitorias de libertad, tal y como lo ha dispuesto el Gobierno Nacional. Al igual están pidiendo medidas preventivas para atender la emergencia en salud porque tampoco tienen atención médica de forma pertinente».

 

A las acciones emprendidas el pasado domingo, se sumó este lunes un amotinamiento en el que dos guardias del Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (INPEC) resultaron heridos.

 

«Esta mañana, a la hora del conteo, nuevamente se amotinan y generan un ataque contra unos auxiliares que tenemos internamente, uno de ellos es herido con arma blanca en la espalda, el otro presenta una lesión en una pierna«, contó a los medios el brigadier general Norberto Mujica Jaime, director del INPEC.

 

La situación fue controlada con el apoyo de la Policía Nacional y del Escuadrón Móvil Antidisturbios (ESMAD).

 

A las demandas de los detenidos, se suma como agravante el hacinamiento en esta y otras cárceles del país. La prisión de Neiva, particularmente, tiene capacidad para 895 internos y actualmente se encuentran 2050, según detalla Blu Radio.

 

El pasado 21 de marzo, los reos de al menos 13 cárceles de Colombia se alzaron en protesta por la falta de protección en las prisiones frente al coronavirus.

 

El levantamiento dejó como resultado 23 presos muertos y 83 heridos. Tras ello, el Ministerio de Justicia y el INPEC decretaron la emergencia penitenciaria y carcelaria en el país suramericano.

 

Defensoría pide acelerar decreto

 

Este lunes, la Defensoría del Pueblo de Colombia, pidió a las autoridades colombianas acelerar «la expedición del decreto reglamentario de la emergencia carcelaria».

 

De acuerdo a esta institución, ese decreto deberá permitir «detenciones domiciliarias con mayor favorabilidad que en el código procesal vigente, con mayor cobertura, sin criterios reduccionistas estrangulantes, para salvar la vida de miles de privados de libertad y de los guardianes servidores públicos».

 

La Defensoría ha mostrado preocupación por los presos en medio de la pandemia. Señala que el último hecho grave que han registrado ocurrió en la cárcel de Villavicencio, en el departamento del Meta, donde fallecieron dos personas que se contagiaron por coronavirus.

 

 

(RT)

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