Muslum Aslan había sido condenado y encarcelado el año pasado por apuñalar a su esposa, Rukiye Aslan, tras una discusión en su casa, en Gaziantep, Turquía.

 

De acuerdo con el diario Mirror, que cita medios turcos, el asesino, de 33 años, fue liberado la semana pasada como parte del plan de amnistía de coronavirus del gobierno de ese país, para frenar la propagación del COVID-19.

 

Muslum Aslan, después de que fue liberado, fue a la casa de su ex con la intención de llevarse a sus 3 hijos. Esa situación llevó a que los adultos se enfrascaran en una fuerte pelea, en la que se metió Ceylan Aslan, la menor de 9 años, señala el rotativo inglés.

 

Posteriormente, el asesino huyó del lugar, pero fue capturado en un parque cercano luego de que la madre de la niña llamara a las autoridades.

 

Aunque Ceylan fue trasladada con vida a un hospital de Gaziantep, los médicos no lograron salvarle la vida debido a las graves consecuencias que le causaron los golpes de su padre, indica Mirror.

 

Rukiye Aslan contó que su ex, del que no está divorciada legalmente, siempre utilizó la violencia mientras vivían juntos, con ella y sus hijos.

 

“Una vez colgó a mi hija mayor (Ceylan) de sus brazos a la pared, luego la golpeó con una manguera, dejándola sangrando en el suelo. Mi hija está muerta; quiero que este asesinato sea castigado fuertemente por lo que ha hecho”, dijo Rukiye, citada por el diario británico.

 

Según la organización We Stop Stop Femicide, 29 mujeres han sido asesinadas en Turquía desde el 11 de marzo, fecha en que se decretó la cuarentena para frenar al coronavirus.

 

(Pulzo)