El gobierno de los Estados Unidos pone en marcha un nuevo plan contra Venezuela con apoyo de la derecha colombiana, ante el fracaso de la arremetida que ha sostenido el imperio para acabar con la Revolución Bolivariana, señaló Juan Carlos Tanus, representante de Colombianos Residentes en Venezuela.
A propósito de las declaraciones de la ex subsecretaria de Defensa de EEUU, Mary Beth Long, quien felicitó a las fuerzas militares de Colombia por estudiar una eventual “amenaza” que pueda representar Venezuela, indicó que las esta representa la tendencia de un sector que intenta impulsar un conflicto armado con el pueblo venezolano.
“Es parte de un libreto que ya fue diseñado”, ante las crisis del imperio norteamericano y del gobierno del presidente Barack Obama, indicó.
Tanus explicó que el plan de la estructura militar colombiana obedece lógicamente a los intereses del gobierno norteamericano. “Hoy y siempre ha sido así, desde 1902, podríamos señalar una fecha, con la separación de Panamá de Colombia, el gobierno norteamericano ha administrado el aparato político y la situación del conflicto colombiano”.
El integrante de la comunidad colombiana dijo que es necesario revisar qué cantidad de recursos pertenecientes al plan de desarrollo 2015 en Colombia están destinados para el fortalecimiento de su estructura militar.
Tanus considera que la situación contrasta con las mesas de negociación que se desarrollan en La Habana, Cuba, así como en el seno del gobierno de Juan Manuel Santos.
“Conocimos como se pidió la intervención de los Estados Unidos en las mesas de negociación (…) esto creo que obedece a un sector de gobierno que está vinculado con la extrema derecha”, como estructura que tiene una relación estrecha con Álvaro Uribe, advirtió.
Recordó que Colombia tiene poco más de 500 mil hombres en su estructura militar, por lo que se preguntó hacia dónde estaría orientada esa fuerza una vez resuelto el conflicto y alcanzado un eventual acuerdo con las guerrillas de las FARC.
Alertó que el comentario de la ex subsecretaria norteamericana tiene, entre otros elementos, la intención de llevarle un mensaje a las fuerzas militares colombianas de que una vez terminado el conflicto interno no se quedarán sin trabajo.
Por otra parte, se prepara en términos psicológicos la nueva arremetida de los EEUU contra Venezuela.
(CO)
