El príncipe Joaquín de Bélgica reconoció este domingo 31 de mayo «no haber respetado todas las medidas de cuarentena» durante su viaje a la ciudad española de Córdoba, donde asistió a una fiesta ilegal que está siendo investigada por la Policía, y pidió «disculpas» por ello.

En un escrito remitido a Efe a través de su portavoz en Córdoba, el abogado Mariano Aguayo Fernández de Córdova, el miembro de la Familia Real belga afirma que se arrepiente «profundamente de sus actos» y asegura que acepta «sus consecuencias».

El príncipe Joaquín asistió en esa ciudad del sur de España a una fiesta que superaba el número permitido de asistentes, todos los cuales han tenido que ser puestos en cuarentena después de que el sobrino del rey Felipe de Bélgica diese positivo por covid-19.

En un único párrafo, escrito tanto en español como en inglés, Joaquín de Bélgica afirma que «en estos momentos difíciles», no pretendía «ofender ni faltar el respecto a nadie».

«Me gustaría disculparme por no haber respetado todas las medidas de cuarentena durante mi viaje. En estos momentos difíciles, no pretendía ofender ni faltar el respeto a nadie. Me arrepiento profundamente de mis actos y acepto las consecuencias. Joachim de Bélgica», escribe en la nota.

Las autoridades de la región de Andalucía (Sur), en la que se encuentra Córdoba, informaron esta semana de que la Policía Nacional española investigaba una fiesta privada ilegal de la alta sociedad en la que un turista extranjero, presuntamente vinculado a la Casa Real belga, dio positivo por coronavirus, lo que puso en cuarentena a todos los asistentes.

Varios medios belgas revelaron este sábado que quien había dado positivo era Felipe de Bélgica, hijo de la princesa Astrid y el príncipe Lorenzo, y aseguraron que las personas puestas en cuarentena habían participado en una fiesta con él.

Fuentes del Palacio Real belga confirmaron a Efe en Bruselas que el príncipe Joaquín, hijo de la princesa Astrid y el príncipe Lorenzo, se desplazó a España el 24 de mayo en un vuelo comercial y con un permiso de entrada en el país, pese a las restricciones por la pandemia, debido a que realiza unas prácticas empresariales en este país.

Varios medios belgas apuntan a que el joven tiene una relación desde hace varios años con la española Victoria Ortiz Martínez-Sagrera.

(EFE)