La muerte de un niño de 3 años identificado como Isaías Lugo, de nacionalidad venezolana, conmovió a la comunidad de  Kennedy, al sur de Bogotá. El pequeño, al parecer, era víctima de violencia intrafamiliar. La madre y el padrastro fueron detenidos.

De acuerdo con las primeras informaciones, se pudo conocer que el menor ingresó muerto a un centro asistencial de esa zona, porque su indefensa humanidad no pudo soportar las heridas producidas por la quemadura de cigarrillos, que minutos después le ocasionaron la muerte.

Asimismo los médicos que lo trataron en la sala de emergencia informaron que también el hoy occiso presentaba desnutrición, señales de golpes y quemaduras en todo su cuerpo, hechas al parecer con cigarrillos y cucharillas calientes. Se presume que el niño venía siendo agredido desde hace mucho tiempo por parte de la madre y su padrastro.

De acuerdo con la versión oficial de la policía, dijeron que la madre del menor, una joven de tan solo 21 años de edad acompañada de su esposo salieron de su vivienda con el menor envuelto entre sábanas. Cuando la comunidad notó que no tenía signos vitales, rodearon a la pareja y trataron de lincharlos, gritándoles que eran unos asesinos. La turba de vecinos no pudo hacer nada por la presencia espontánea de  los funcionarios policiales.

Horas después de que fue certificado el fallecimiento del niño, la madre y el padrastro del pequeño fueron detenidos y presentados ante la Fiscalía General de la nación. Al parecer, el niño venía siendo agredido desde hace mucho tiempo por parte de los dos.

(El Periodiquito)