El robo, el saqueo, el despojo de riquezas ha sido siempre el modo de proceder de las potencias coloniales. Antes ejecutaban esos delitos mediante la fuerza de las armas. Ahora lo hacen imponiendo las decisiones de sus tribunales a los otros países. «Es neocolonialismo del más balurdo y cobarde», resumió Miguel Ángel Pérez Pirela en su programa Desde donde sea.

El espacio de televisión 2.0 del filósofo y comunicador se dedicó a este tema, luego de que un tribunal británico otorgara el control de 31 toneladas de oro, propiedad de la República Bolivariana de Venezuela, al diputado Juan Guaidó, bajo el argumento de que el gobierno del Reino Unido lo reconoce como “presidente interino constitucional”.

«Estamos ante una nueva arremetida imperialista, frente a la legalización de la  lógica del despojo, de la piratería, del robo del norte del mundo contra el sur», subrayó en un tono de inocultable indignación que sostuvo durante todo el programa.

Señaló que ya este tipo de acciones se han convertido en un modus operandi. «En varias partes del mundo se da el mismo fenómeno contra los activos del Estado venezolano, de la República Bolivariana de Venezuela, es decir de los venezolanos y las venezolanas. Se trata de una judicialización ya no solo de la política sino también de la soberanía de los Estados. Se somete la soberanía de los Estados a la decisión de un juez o fiscales sin ninguna jurisdicción. Más allá de la inmoralidad, se quiere robar a todo un país a partir de la decisión de un juez o un fiscal. Antes, acaso, en alguna guerra, un ejército saqueaba las riquezas de un país. Pero al menos eso le daba algún chance de que los pueblos, aún en minoría bélica, pudieran responderles a las superpotencias y colonialistas, llevarse en los cachos a uno que otro invasor. Ahora ni siquiera tienen ese valor. Hoy  se le da a un juez o fiscal la jurisdicción, la potestad legal de estar por encima de las leyes del país en cuestión. Estos saqueadores ingleses, europeos, deben ser denunciados», expresó.

Al examinar los antecedentes, puntualizó que no es una práctica actual, sino que viene desde hace siglos, con los procesos de colonización y las prácticas de piratería. En el siglo XXI sigue siendo la misma lógica. ¿Qué hicieron los ingleses, franceses y los alemanes en África; y los EEUU desde México hasta la Patagonia. Antes lo hacía con su poderío bélico. Hoy se esconden detrás de sus leyes internas, aplicadas a terceros. Los tribunales ingleses se roban nuestro oro, los tribunales gringos que se roban Citgo de 30 mil millones de dólares y la rematan en 2 mil 500 o 3 mil, embolsillándose 27 mil millones de dólares de los venezolanos  y las venezolanas. Lo mismo está pasando con el Deutsche Bank, de Alemania. Y mientras hablamos, fiscales de EEUU buscan confiscar, es decir, robar, piratear, cuatro tanqueros iraníes que vienen rumbo a Venezuela con gasolina, según el Wall Street Journal«.

Dio detalles de esta última información, indicando que el miércoles (1 de julio) en la noche se presentó en la corte federal del Distrito de Columbia un reclamo de confiscación civil que alega que la venta de gasolina de Irán  a Venezuela fue manejada por Mahmoud Madanipour, un empresario vinculado con el Cuerpo de Guardia Revolucionaria de Irán (CGRI), designada por Estados Unidos como organización terrorista extranjera. En los razonamientos judiciales vuelven a aparecer las socorridas excusas del terrorismo y las armas de destrucción masiva que han sido utilizadas por EEUU para invadir países y destruirlos.

El fiscal Zia Faruqi, alega en la demanda que “Las ganancias de estas actividades apoyan toda la gama de actividades viles del CGRI que incluyen la proliferación de armas de destrucción masiva y los medios de entrega, apoyo al terrorismo y una variedad de abusos de los derechos humanos en el país y el extranjero”.

“Explicó el medio que con esta demanda los fiscales buscan, además de impedir que Venezuela reciba una nueva entrega de combustible iraní, privar a Teherán de los ingresos de la carga y disuadir futuros envíos”.

“Esta acción es la última de una serie de medidas que Estados Unidos ha tomado contra Irán y su aliado Venezuela, como parte de una amplia operación para presionar a los gobiernos de Teherán y Caracas para que cumplan con las demandas estadounidenses», indican las notas de prensa.

«Aquí se observa que los fiscales y jueces de EEUU están por encima de las normativas de Venezuela e Irán y del derecho internacional de libre comercio. ¿O es que ahora lo que diga un fiscal o un juez de EEUU o de Europa, es ley universal y está por encima de los países? Es neocolonialismo del más balurdo y cobarde porque antes al menos lo hacían con ejércitos. Hoy desde los aires acondicionados y testículos entalcados de Washington o Londres se decide que una empresa de 30 mil millones de dólares o 31 toneladas de oro ya no son de los venezolanos y las venezolanas, sino de un irresponsable que levantó la mano y dijo ‘yo soy el presidente'».

Pérez Pirela comentó sobre el desempeño de la supuesta embajadora de Guaidó en Inglaterra, Vanessa Neumann, “una señora que no vive en Venezuela hace muchísimos años, es gringa y habla español con acento gringo, y apareció celebrando porque ahora todo el oro es para Guaidó. Hace unos meses estaba intercambiando la zona en reclamación del Esequibo por el palacio de Miraflores. Ahora está feliz porque le dieron el oro a Guaidó. Una vez que se conoció la decisión del juez, dijo que ‘conociendo a los británicos, yo me imagino que sería mejor que ese oro se quede resguardado aquí hasta que hayan elecciones justas y libres’. Y añadió que  no debe usarse para la emergencia por el Coronavirus porque ‘es mucho dinero para destinarlo a eso. No es una cuenta corriente para aprovecharlo para una crisis temporal’. Ella, que no es nadie, como funcionaria de un gobierno que no existe, decide que no se va a usar en la pandemia».

“Pueden quedarse con el oro, pero Guaidó no va a ser presidente. Señores ingleses, ustedes se están robando el oro; señores EEUU, ustedes se robaron  Citgo; señores colombianos, ustedes se robaron Monómeros; Señores alemanes, ustedes también están buscando la forma de robarse el oro, pero Guaidó no va a ser presidente», remarcó.

Acotó que el acto despojo ha sido tan descarado que hasta Euronews, «la CNN europea», ofreció la noticia en tono irónico, al decir que Inglaterra le dio el oro venezolano a Guaidó. «Hasta en ese titular se percibía el malestar, y si Euronews tiene malestar, ustedes se podrán imaginar…».

Barbarazo

El moderador equiparó la actuación de la camarilla encabezada por Guaidó con  el protagonista del merengue El Barbarazo, del que cantó un fragmento. «Llegará un momento en que no van a tener ya que robarse. Ya está llegando ese momento. Leopoldo López, Guaidó, Lilian Tintori, Smolansky, Vecchio, Borges han armado una banda de delincuentes internacionales de cuello blanco y se están haciendo de billones de dólares y euros en un año. Dentro de poco los veremos en los récords Guinness», dijo.

«El problema es que les quedan cinco meses para raspar la olla porque después de las elecciones ya Guaidó no será ni siquiera diputado.

El fallo judicial

Pérez Pirela dio detalles sobre la decisión del juez británico Nigel Teare, señalando que le da directamente a una persona, a un particular, el oro venezolano. «Es piratería pura. ¿Dónde están las cuentas del supuesto gobierno de Guaidó? Por eso es que esos fondos terminan en sus cuentas personales o en el Departamento del Tesoro de EEUU. Es un oro que hace parte del patrimonio venezolano y se lo dan a un señor que logró dividir a la oposición por escándalos de corrupción».

Citando el contenido de la sentencia, precisó que: «El gobierno británico reconoce al señor Guaidó en la capacidad de presidente constitucional interino de Venezuela y en virtud de la doctrina de ‘una única voz’ la corte debe aceptar esa declaración como inequívoca».

«¿Quién será este juez?», se preguntó, y respondió que seguramente es «un cachetón burócrata aburrido y frío, bucólico, que a esta hora debe estar durmiendo en pijama, con un sombrerito y medias, para nos resfriarse, de espaldas a su esposa. Un personaje así es el que termina decidiendo sobre lo que no es de él ni tampoco de Inglaterra. ¡Fin de mundo!».

Según Teare, como quiera que el gobierno del Reino Unido ha reconocido inequívocamente a Guaidó como presidente interino constitucional de Venezuela, se entiende que es directivo del Banco Central de Venezuela, por lo que puede acceder a estas reservas de oro.

«Guaidó nunca ha pisado el BCV y el supuesto procurador (Juan Ignacio Hernández), que ya le renunció a Guaidó, confesó que no tiene ni siquiera una hoja timbrada o un sello de la República Bolivariana de Venezuela. No existen. Es un gobierno de mentira. Lo que sí existe es una operación financiera para despojar a Venezuela de todas sus riquezas y hacerse ricos en tiempo récord», enfatizó.

Detalles del juicio

Para poner en contexto a la audiencia sobre el juicio en el tribunal británico, dio detalles recopilados por el Equipo de Investigación de Desde donde sea.

El abogado de Venezuela, Sarosh Zaiwalla, acusó al Banco de Inglaterra de negarse a permitir que el oro sea entregado a la ONU para que sea utilizado en la lucha contra el Covid-19 en Venezuela. Alegó que ninguno de los supuestos directivos del BCV designados por Guaidó vive en Venezuela desde hace años. Unos viven en Washington y otros en Colombia.

El acceso a las reservas de oro ya fue denegado en el año 2018, cuando el Gobierno de Maduro, en medio de las crecientes sanciones internacionales, le pidió al Banco de Inglaterra liberar el oro que guardaba bajo sus bóvedas. Pero en enero del 2019, está solicitud fue denegada. En ese entonces, el banco alegó que el primer ministro británico, Boris Johnson, solo reconocía a Guaidó como mandatario legítimo, después de que el parlamentario opositor se autoproclamara en una plaza.

A mediados de mayo, el BCV acudió a una corte en Londres para reclamar que el Banco de Inglaterra no cumplía con su instrucción de vender parte del oro depositado allí y entregar los fondos al Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) para administrar la compra de suministros y equipos médicos para luchar contra el Covid-19. Los documentos legales, fechados el 14 de mayo, dicen que el Banco Central de Venezuela solicitó que la transferencia se realizara «con carácter de urgencia».

Guaidó escribió dos veces a las autoridades británicas y del Banco de Inglaterra para que no le dieran el oro al gobierno de Maduro porque iba a ser utilizado con fines corruptos.

El frío, cachetón y entalcado juez británico falló a favor del autoproclamado.

Presentarán un recurso contra la sentencia por considerar que ignora la realidad de la situación sobre el terreno. Las partes tienen un plazo de tres semanas para apelar la sentencia.

«No me hago ilusiones porque la historia de expoliación inglesa es de larga data y han encontrado una razón espectacular para robar el oro», concluyó.

¿Hasta cuándo con Guaidó?

Una pregunta del público replanteó un tema que ha sido motivo de anteriores emisiones del programa: ¿Hasta cuándo se le permitirá a Guaidó que actúe impunemente?

«Es la pregunta que todos nos estamos haciendo. Está claro que Guaidó sirve más afuera que dentro de una cárcel porque esta pantomima ya no tiene ninguna credibilidad… ni dentro ni fuera del país porque Trump lo ve como un carajito débil».

Insistió en que Guaidó es solo el instrumento de los países imperiales para perpetrar sus robos. «A ese pendejo le están dando muchísima plata, pero son apenas migajas, comparado con lo que se están ganando Inglaterra y EEUU. Él y su pandilla son gestores, bufones de teatro contra su propia patria».

Manifestó que este rol solo pueden seguir desempeñándolo en las condiciones políticas actuales. «Por eso no quieren ir a elecciones, porque sin elecciones siguen teniendo a Guaidó como ‘presidente’ para robarle todo lo que puedan a Venezuela -dijo-. Reino Unido le entrega 31 toneladas de oro de Venezuela a un carajito que no sabe ni hablar y al que Trump le hizo levantar la mano y decir que es el presidente de Venezuela sin que nadie haya votado por él. El mismo carajito que si se para en cualquier lugar de Caracas, en una zona de izquierda o de derecha, y no llena una cuadra. No digo yo, lo dice la realidad… Es el colonialismo, el colonialismo».

Ladrones desde adentro

El analista hizo mención a la pregunta que le formuló hace poco un niño, y que también se hacen muchos adultos: ¿por qué el oro venezolano está en Inglaterra?

Para responderla, leyó fragmentos de un trabajo periodístico en el que se indica que «el Banco de Inglaterra es el segundo mayor tenedor de oro en el mundo, con aproximadamente 400 mil lingotes de oro. Solo el Banco de la Reserva Federal de Nueva York, Estados Unidos, tiene más. Un quinto del oro de los gobiernos del mundo se encuentra en Londres y la razón es simple: la capital británica es el centro mundial del comercio del metal precioso».

Agregó que desde hace diez años Venezuela está pidiendo ese oro y el Banco de Inglaterra se ha negado a entregarlo. Esto demuestra que la razón no es el supuesto conflicto de representatividad entre el gobierno y Guaidó.

«Hace diez años, cuando Venezuela empezó a reclamar su oro, Guaidó andaba pelándose las nalgas en las protestas de la derecha, un tipo de protesta, por cierto, muy de estilo gringo, porque acá en Venezuela eso no se acostumbra. Acá el que se pele las nalgas para protestar… ¡Ay, compadre… ay, comadre!».

Observó que esta actitud del Banco de Inglaterra es inaceptable porque Venezuela es su cliente,  pero es el banco el que decide lo que se hace con el dinero depositado. «¡Vaya qué banco tan serio!».

Leyó otro párrafo de la nota sobre el Banco de Inglaterra:

«Tiene además una de las bóvedas de oro más grandes del mundo y se destaca porque en sus más de 320 años de historia nunca un lingote de oro ha sido robado en sus instalaciones. Por eso, los bancos centrales de varias naciones lo usan para almacenar sus reservas nacionales».

Al respecto comentó que «ya no hace falta que un ladrón entre a las bóvedas sino que el banco les entrega el oro, con una sonrisa, a ladrones de cuello blanco que llegan con el aval de EEUU a decir que es suyo».

«Qué pensarán los 30 países que tienen plata ahí. Todos corren el riesgo que le ocurra lo mismo. Le están haciendo al sur del mundo lo que Hitler les hizo a ellos», alertó.

 ¿A quién le están dando el oro?

Pérez Pirela propuso hacer abstracción de todas las normas internacionales y nacionales, incluyendo la Constitución, que están siendo pisoteadas, y enfocarse en analizar a quién le otorgó el oro este ente financiero.

«Se lo están dando al campeón en casos de corrupción en la oposición. Se lo están dando a los que hicieron el Cucutazo, un conjunto de escándalos tan grandes que hasta  Almagro (el mismo del golpe de Estado en Bolivia) pidió una investigación sobre la apropiación de fondos de ayuda humanitaria por parte de representantes de Guaidó en Colombia… Para que Almagro haya dado ese paso, así habrá sido el desastre».

Recordó que en este punto se la ayuda humanitaria, la pandilla de Guaidó y Voluntad Popular le quitó dinero hasta al cantante Don Omar y a donantes de EEUU, Canadá, Alemania, Suecia, Chile, Argentina, Colombia, y la Unión Europea.

«El escándalo fue tan grande que Humberto Calderón Berti, el supuesto embajador de Guaidó en Colombia, denunció que los recursos fueron desviados y que las mismas autoridades colombianas le informaron acerca de todos los usos que se le dieron a los fondos: licor, drogas, prostitutas, facturación ficticia y manejos extraños. También se quejó del maltrato a 148 militares desertores que terminaron siendo mantenidos por la ACNUR. Y acusó a Kevin Rojas y Rosana Barrera, fichas de Voluntad Popular, de haber malversado al menos 100 mil dólares. Frente a estas denuncias, Guaidó lo botó alegando modificaciones en su política exterior… A esa gente es a la que le están dando casi 31 toneladas de oro».

En cuanto a las denuncias periodísticas del caso CLAP, se supo que parlamentarios opositores estuvieron involucrados en una trama para otorgar indulgencias a empresarios que trabajaban con el Estado venezolano, de modo que no los sancionaran en EEUU. Fueron 11 diputados, incluyendo 3 de Voluntad Popular, los que hicieron gestiones ante Departamento del Tesoro  de EEUU y la Fiscalía de Colombia. Guaidó los suspendió e iba a investigar, pero no pasó nada.

«En enero, el nuevo presidente de la Asamblea Nacional,  no de la para-asamblea de Guaidó, Luis Parra, pidió investigar la supuesta ayuda humanitaria de la USAID, que ha sido otro de los grandes negocios de este grupo. La  USAID ha suministrado desde 2017 casi 467 millones de dólares a la oposición venezolana para supuesta ayuda humanitaria que no ha llegado a manos de ningún venezolano necesitado. En octubre de 2019, se comprometió a dar  128 millones de dólares más para ayuda a Guaidó».

En el año y medio que Guaidó lleva actuando como supuesto presidente, él y sus cómplices también se han robado las empresas Citgo y Monómeros, Citgo y han negociado la entrega del Esequibo.

«Con esos antecedentes, hay que preguntarse adónde va a terminar este oro: ¿en los hospitales, curando a los infectados de Covid-19, en insumos médicos para luchar contra la pandemia? Para que le den la silla de Miraflores a Guaidó, nos va a costar un tercio del territorio, el oro que está en Inglaterra, una empresa de 30 mil millones de dólares en EEUU, otra en Colombia. Y todo porque así lo ordenó Donald Trump, el presidente que tiene a EEUU cundido de coronavirus, de protestas raciales y a punto de perder las elecciones. Por eso andan apuraditos en la expropiación”.

«Para completar el cuadro, el Deutsche Bank  de Alemania quiere que otro juez decida al igual que ocurrió con el Banco de Inglaterra, si unos 123 millones de dólares de Venezuela deben entregarse al gobierno de Nicolás Maduro o al supuesto presidente interino Juan Guaidó. El mismo cuento en versión alemana. Seguramente lo va a decidir otro juez cachetón entalcado. Ya no se necesitan ejércitos ni un mínimo de valor o de orgullo para robarle a los países su oro o sus activos», reiteró.

Cerró sus reflexiones con las palabras de la vicepresidenta Delcy Rodríguez, quien dijo que pretenden que Venezuela es una colonia de Inglaterra, y denunció que «negar el oro de Venezuela para atender la pandemia es cometer delitos de exterminio, es atentado de lesa humanidad contra el pueblo venezolano”.

Libro

Recomendó el libro El periodismo según Clark Kent, del profesor, periodista y constituyente Earle Herrera

(LaIguana.TV)