Un alcalde brasileño defiende la apertura de comercios “muera quien muera”, pese a que su municipio ya no tiene capacidad hospitalaria para enfermos de COVID-19.

El municipio de Itabuna, en el estado brasileño de Bahía (noreste), ha permanecido en confinamiento social desde el mes de marzo y tenía previsto iniciar la reapertura de actividades comerciales el jueves; sin embargo, debido a la falta de las Unidades de Terapia Intensiva (UTI) para los pacientes del nuevo coronavirus, causante de la COVID-19, se decidió posponer la fecha.

Sin embargo, las declaraciones del jueves del alcalde de este municipio, Fernando Gomes, sobre la reapertura del comercio en esta región han provocado críticas y rechazos en las redes sociales.

Entonces, con la duda y con los nuestros muriendo por una cama en Itabuna, transferiré esa apertura (del comercio). Ordené publicar el decreto el día 8, para que el día 9 abra, muera quien muera”, expresó el burgomaestre de Itabuna.

En Itabuna, con unos 200 mil habitantes, solo existen 30 camas para atención de pacientes con el coronavirus, en un momento en que se registraron unos 2637 casos confirmados y 58 muertos, indican los informes oficiales.

Además, el noreste brasileño, donde se encuentra Itabuna, es una de las zonas más empobrecidas y más afectadas por la pandemia del virus mortal en todo el país. En este contexto, un estudio realizado por la Universidad Federal de Pelotas (Brasil) indicó el jueves que el contagio en Brasil está creciendo más entre los pobres, los negros y los indios, que tienen tasas de contagio tres veces superior a los blancos y los ricos.

Brasil, tras Estados Unidos, es el Estado más afectado del mundo, tanto a nivel de contagios como de muertes; no obstante, los expertos han advertido varias veces de que el número real de casos en el país suramericano podría ser mucho más de los reportados en las estadísticas oficiales.

(HispanTV)