La Organización Mundial de la Salud (OMS) sostiene que los casos de peste bubónica detectados en China y Mongolia no entrañan peligro, pero sigue el desarrollo de la situación, declaró la portavoz de la OMS, Margaret Harris, en una sesión informativa para los medios.

«Estamos vigilando este brote en coordinación con las autoridades de China y Mongolia. De momento no creemos que exista un alto riesgo, pero estamos siguiendo atentamente el desarrollo de la situación», dijo.

La peste bubónica se detectó en un pastor en la provincia china de Mongolia Interior y también en dos personas en el oeste de Mongolia, región limítrofe con la República de Altái rusa.

La Embajada de Rusia en Ulán Bator confirmó que las autoridades de Mongolia tomaron las medidas adecuadas y señaló que no existen motivos para sentirse alarmados.

La peste bubónica es causada por la picadura de las pulgas que viven en las marmotas.

La bacteria Yersinia pestis, que provoca la enfermedad, al entrar en el organismo humano ataca los ganglios linfáticos.

En la Edad Media la peste causó una gran devastación en Europa cobrándose millones de vidas.

(Sputnik)