Más de 60.500 nuevos contagios de covid-19 fueron notificados en Estados Unidos, según un recuento de Reuters hasta este jueves 9 de julio, estableciendo un nuevo récord diario mientras se insta a unos estadounidenses ya cansados a que tomen nuevas precauciones y la pandemia se va politizando cada vez más.

El total representa un ligero aumento desde el miércoles, cuando hubo 60.000 nuevos casos, y marca el mayor incremento de un día de cualquier país desde que la pandemia surgió en China el año pasado.

A medida que los contagios van aumentando en 41 de los 50 estados durante las últimas dos semanas, los estadounidenses se dividen cada vez más en cuestiones como la reapertura de escuelas y empresas. Las órdenes de los gobernadores y líderes locales, que exigen el uso de mascarillas, se han vuelto particularmente divisorias.

“Es simplemente desolador porque el egoísmo de (no usar mascarilla) frente al altruismo de mi equipo y de las personas de este hospital está poniendo a todos en riesgo, y por eso tuve covid-19”, dijo el doctor Andrew Pastewski, director médico de la UCI en el Centro Médico Jackson South de Miami.

“Nos estamos poniendo en riesgo y otras personas no están dispuestas a hacer nada y, de hecho, van en la dirección contraria y acaban impulsando los contagios de manera agresiva. Es muy, muy difícil”, dijo.

El jueves, Florida anunció casi 9.000 nuevos casos y 120 nuevas muertes por coronavirus, un récord diario de vidas perdidas.

Florida es uno de los pocos estados que no divulga el número de pacientes hospitalizados con covid-19. Pero más de cuatro docenas de hospitales de Florida informaron que sus unidades de cuidados intensivos alcanzaron su máxima capacidad a principios de esta semana.

En Texas un grupo de propietarios de bares demandaron al gobernador Greg Abbott, un republicano, diciendo que su orden de confinamiento del 26 de junio viola la constitución del estado, informó el Dallas Morning News.

(Reuters)