Citando extensamente el artículo intitulado «Covid-19: cuando ser gobernado por la ultraderecha es un factor de riesgo en sí», escrito por Luis Gonzalo Segura, Miguel Ángel Pérez Pirela presentó argumentos que apuntan hacia la existencia de una relación entre la posición en el espectro político de un gobernante y la gestión que este hace de la pandemia, lo que resulta particularmente notorio en el caso de países con mandatarios de ultraderecha.

Segura sostiene que, «casualidad o no, los gobiernos de ultraderecha se muestran aparentemente más proclives a la expansión de la pandemia: «Estados Unidos, Brasil y Reino Unido, tres países gobernados por ultraderechistas que compartieron la misma actitud ante el coronavirus».

Esta actitud, precisó Pérez Pirela, puede resumirse en «negligencia y temeridad«. Así, continuó citando al autor, ora por casualidad, ora por una cierta gubernamentalidad que es propia de la ultraderecha, estos gobiernos «han propiciado la expansión del virus», lo que se explica, en criterio de Segura, «por la sorpresa inicial y por la actual tendencia al desmantelamiento de los Estados en el mundo capitalista, especialmente el tejido público, lo que ha provocado que los gobernantes parezcan más asesores de las multinacionales que gestores de los ciudadanos».

De lo anterior, se concluye entonces que «ser gobernados por ultraderechistas en tiempos de pandemia, es una invitación a la desgracia. Incluso para los propios ultraderechistas, pues Boris Johnson fue ingresado por Covid-19 y Jair Bolsonaro acaba de dar positivo».

(LaIguana.TV)