Brasil volvió a superar este martes 21 de julio la cifra de 1.000 fallecidos por día por coronavirus y registró 1.367 muertes en las últimas 24 horas, con lo que el total llega ahora a 81.487, con 2.159.654 casos confirmados, según datos oficiales.

Durante las últimas dos jornadas, la cifra de muertes confirmadas cada día se había situado por debajo del millar, pero el Ministerio de Salud ha explicado que los fines de semana se reduce el personal a cargo de recopilar los datos, que no llegan a ser completos.

En las últimas 24 horas también aumentó en forma exponencial el número de contagios, que sumó otros 41.008 para superar la barrera de los 2,15 millones, con la curva pandémica en ascenso en varias zonas del país, en especial en la región sur, que comienza a sentir las bajas temperaturas y los rigores del invierno austral.

Según el balance diario difundido este martes, 612.197 pacientes aún se encuentran bajo observación y 1.465.970 se han recuperado.

Entre quienes han superado la enfermedad se puede ubicar en las próximas horas el presidente del país, Jair Bolsonaro, uno de los mandatarios más negacionistas frente a la gravedad de la pandemia y que dio positivo de coronavirus el pasado 7 de julio.

Bolsonaro cumplió este martes los 14 días preceptivos de reclusión en su residencia oficial, a cuyos jardines salió al caer la noche para anunciar que espera el resultado de un nuevo análisis que le fue realizado hoy mismo, para «volver a la normalidad».

El líder de la ultraderecha brasileña fue sometido a un examen la semana pasada y volvió a dar positivo, por lo que los médicos que lo atienden decidieron mantenerle en confinamiento.

Según dijo el propio Bolsonaro, esa situación puede acabar esta misma semana, en función del resultado de este nuevo examen. «Si Dios quiere será negativo», declaró en un video divulgado en sus redes sociales. 

(EFE)