En esta grabación, tomada en Saint-Ubalde, en la provincia de Quebec, Canadá, se ve cómo una madre toma un baño en las pacíficas aguas de un lago, rodeado de casas. 

Lo que más llama la atención del vídeo es que la osa no se olvida de su osezno, quien parece disfrutar del paseo, subido a los hombros y la cabeza de su mamá.

Los cachorros de oso negro y pardo no pueden nadar hasta que pesan alrededor de 13,6 kilogramos, por lo que esta es la única manera que tiene este pequeño de disfrutar del agua.

(LaIguana.TV)