La pandemia de la Covid-19 se agudiza en el Estado español y el país vive un repunte de los contagios en todo el territorio, al contabilizar este martes unos 2.100 nuevos enfermos y llegar a un acumulado de 364.196.

La información refleja la tendencia de los últimos días, en que se reportan las cifras más altas desde el fin del estado de alarma decretado por el Gobierno central en junio último.

Ante la actual situación, el Ministerio de Sanidad (Minsa), de conjunto con las consejerías de Salud de las comunidades y ciudades autónomas, acordaron un plan de una decena de acciones. Entre las medidas más significativas se encuentran el cierre total o parcial, según el caso, del ocio nocturno y la prohibición de fumar en la vía pública.

La crisis sanitaria ha vuelto a tener sus cotas más elevadas en Cataluña (noroeste) y Madrid (centro). En la capital la situación se encuentra fuera de control, pues el manejo de la pandemia por parte de Isabel Díaz de Ayuso (del Partido Popular) no logra contener el crecimiento de los rebrotes.

En Madrid, a pesar del alza de contagios, la mitad de las personas citadas a masivos cribados para pruebas de PCR no han acudido a las citas y los principales hospitales de la ciudad, si bien no muestran la situación de abril pasado, se preparan para recibir un aumento de los casos.

El País Vasco entró en un particular estado de emergencia pues en la región el aumento de los casos ha sido exponencial en las últimas semanas, y en general en todas las comunidades se han prohibido las actividades públicas de recreación.

En medio de la tensa situación sanitaria, este domingo, la convocatoria de varios artistas y grupos negacionistas logró reunir varios miles de personas en la plaza Colón, del centro de Madrid. Los manifestantes protestaron contra el uso de la mascarilla (la cual se ha vuelto obligatoria en público) y contra la posible vacuna anticovid, bajo el pretexto que se trata de «una conspiración para implantar nanochips».

(teleSUR)