Giancarlo Di Martino, quien actualmente es cónsul de Venezuela en Milán, Italia, propuso que al dueño del restaurante «Muerde la carne«, ubicado en Maracaibo, estado Zulia, le debe caer todo el peso de la ley, y obligarlo a realizar labor social en los hospitales donde están las personas enfermas con el nuevo coronavirus.

Este fin de semana las autoridades de la capital zuliana descubrieron que en el mencionado restaurante se realizaba una fiesta privada repleta de personas sin tapabocas y sin las debidas medidas de higiene preventivas contra la COVID-19, un hecho que además viola en flagrancia las medidas de emergencia dictadas por el Ejecutivo para evitar la propagación de la pandemia en el territorio nacional.

Di Martino, quien fue alcalde de Maracaibo desde el año 2000 hasta 2008, se refirió a la fiesta en ese restaurante como un «coronaparty«, pues es un escenario propicio para que la COVID-19 se propague de forma masiva entre los asistentes y luego estos la distribuyan en sus siguientes contactos.

«Al dueño de Muerde la Carne, que tenía una rumba sin tapabocas, un «coronaparty» en Maracaibo, hay que aplicarle todo el peso de la ley. Que vaya a los hospitales. Que haga labor social en los CDI u otro centro de salud. Que pague el daño que causa, propagando el contagio», resaltó Di Martino.

El mencionado restaurante fue clausurado luego de que se encontraran 35 personas dentro del local, comiendo e ingiriendo bebidas alcohólicas, informó César Garrido, director ejecutivo de la Alcaldía de Maracaibo.

El procedimiento se realizó a la 1 de la madrugada de este domingo, tras la denuncia de varios vecinos que no evitaron la incomodidad de la aglomeración evidente en el local, pues los comensales habían estacionado sus vehículos -15 en total- en la parte externa.

Garrido, quien encabezó la acción, informó que se detuvieron a 35 personas, a su vez se ordenó clausura del local por incumplimiento de la cuarentena, donde solo está permitido el servicio de comida para llevar.

(LaIguana.TV)