La violencia policial por motivos raciales ha sido el detonante de protestas en todo EEUU, luego de que el vaso rebosara su límite con el asesinato de George Floyd a manos de agentes policiales de Mineápolis el 25 de mayo pasado.

La respuesta por parte del Gobierno de Donald Trump ha sido aumentar los gastos en material antidisturbios y engrosamiento de agentes policiales para reprimir a los protestantes en 114 %.

La periodista Helena Villar, a través de Twitter, comentó: “Las agencias federales estadounidenses están reforzando sus arsenales de material antidisturbio, es decir: gases lacrimógenos, balas de goma y otros equipos de control de multitudes, esto ha ocurrido desde que el Presidente (Trump) ordenase a los agentes federales asumir tareas propias de la policía en ciudades con protestas”, expresó la reportera de RT en Washington D.C.

Los organismos de seguridad civil estadounidense han gastado 28,6 millones de dólares desde el asesinato de George Floyd, lo que ha elevado las ganancias de, por ejemplo, empresas fabricantes de pistolas Teaser.

Mientras que las protestas han vuelto a las calles estadounidenses luego de que se difundiera un video donde policías de Wisconsin disparan contra otro afroamericano indefenso de nombre Jacob Blake.

(LaIguana.TV)