La preocupación por una posible segunda ola de COVID-19 ha provocado que los precios a nivel mundial del petróleo se desplomen.

El precio de los futuros de noviembre para petróleo Brent cayó un 3,78% a 41,52 dólares por barril, mientras que el precio de los futuros de noviembre para el WTI cayó un 4,11% a 39,61 dólares por barril.

Los inversores de petróleo temen que el comienzo de una segunda ola de coronavirus pueda ejercer presión sobre toda la economía mundial, incluyendo la demanda de crudo.

Muchos países están registrando un aumento de tasas de infección y están reforzando las medidas de cuarentena. Además, las noticias sobre la reanudación de la producción en Libia están ejerciendo una presión adicional sobre los precios del petróleo.

(sputniknews.com)