Durante la jornada del miércoles -14 de octubre- las redes sociales se viralizaron en torno a una publicación difundida por el diario New York Post (NYP) que asegura que el candidato demócrata a la Presidencia de los Estados Unidos, Joe Biden, habría tenido contacto con «un alto funcionario» de una compañía de energía ucraniana que posteriormente se convirtió en el foco de una controversia tras el despido de un fiscal que estaba investigando a su empresa.

El contacto entre Biden, quien entonces era vicepresidente de Barack Obama, y el referido empresario ucraniano identificado como Vadym Pozharskyi fue a través de su hijo Hunter Biden, según indica un correo electrónico citado por el NYP en su publicación que también involucra a su otro hijo Joseph R. Biden Jr.

Vadym Pozharskyi, quien era entonces asesor de la junta de Burisma -según el NYP-, agradeció a Hunter en un correo electrónico de abril de 2015 por haberlo invitado a Washington y “brindarle la oportunidad de conocer a su padre”. Esto ocurrió aproximadamente un año después de que el hijo del entonces vicepresidente se uniera a la compañía ucraniana.

Un correo electrónico de mayo de 2014 también indicó que Pozharskyi buscó el consejo de Hunter Biden sobre las formas en que “podría usar su influencia” en nombre de Burisma.

Según el NYP, la comunicación contradice una afirmación de Joe Biden de que no ha hablado con su hijo sobre sus negocios. Sin embargo, el correo electrónico no detalla el alcance de la reunión o si Biden habló con su hijo al respecto.

La publicación sirvió para que inmediatamente, el candidato republicano Donald Trump, acusara a Biden por sus supuestos vínculos con la empresa ucraniana, argumento que utilizó para decir que el entonces vicepresidente de los Estados Unidos presionó para destituir al fiscal general del país y así «beneficiar» a su hijo Hunter.

En septiembre pasado, dos presidentes del comité republicano del Senado intentaron revivir las acusaciones en torno a los tratos de Hunter Biden en Ucrania, pero su informe abrió pocos nuevos caminos al descubrir que su papel en la junta de Burisma puso a los funcionarios del Departamento de Estado en una posición “incómoda”.

¿Fake news?

Entre tanto el comando de campaña de Biden rechazó el mismo miércoles la información reseñada por el NYP sobre Joseph R. Biden Jr. y su hijo Hunter. La queja de los demócratas llevó a que las principales empresas de redes sociales estadounidenses como Twitter y Facebook consideraran la publicación como dudosa y de inmediato limitaron el acceso al artículo en sus plataformas.

El informe, que apareció apenas tres semanas antes de las elecciones, se basó en material proporcionado por los aliados republicanos del presidente Trump que han intentado durante meses empañar la campaña de Biden con la vida personal de su hijo.

Alegan que el NYP asegura que Biden «se había reunido con un asesor de una empresa de energía ucraniana en cuya junta Hunter Biden se desempeñaba», pero al revisar los horarios y las reuniones de Biden, tal reunión nunca se realizó.

Andrew Bates, un portavoz de la campaña de Biden, dijo: «Hemos revisado los horarios oficiales de Joe Biden desde el momento y no se llevó a cabo ninguna reunión, como alega el New York Post».

Además, la historia del NYP que cita «un correo electrónico» donde Pozharskyi supuestamente envió a Hunter Biden agradeciéndole por «darle la oportunidad de conocer a su padre» y pasar «algún tiempo juntos», sería infundada debido a que «la autenticidad de la correspondencia por correo electrónico citada por el NYP no se pudo verificar de forma independiente», añade una información publicada por The New York Times.

Entre tanto, horas después que el NYP publicara su artículo, Facebook informó que había decidido limitar la distribución de la historia en su plataforma para poder verificar si las afirmaciones eran verdaderas.

Por su parte, Twitter dijo que bloqueó el artículo porque incluía números de teléfono y direcciones de correo electrónico personales, hecho que viola sus reglas de privacidad y porque el artículo infringe su política sobre materiales pirateados.

Estas acciones de Facebook y Twitter provocaron de inmediato fuertes reacciones de los republicanos, pues aseguran que las plataformas de redes sociales los estaban censurando.

A estas denuncias se sumó el bloqueo de la cuenta personal de la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Kayleigh McEnany, por haber publicado la historia del NYP. La senadora Marsha Blackburn de Tennessee, una aliada incondicional de Trump, calificó la acción de Twitter como «despreciable» y la denominó «la verdadera interferencia electoral».

Facebook, Twitter y YouTube han sido criticados por Trump y otros republicanos durante años por supuestamente censurar sus opiniones. Las empresas, ubicadas en el liberal Silicon Valley, han negado esas afirmaciones.

Entre tanto, Hunter Biden sigue siendo parte de la campaña presidencial debido a que Trump insiste en que el hijo de su contrincante -quien lo aventaja en las encuestas por 10 puntos porcentuales- ha participado en negocios turbios, y que esto lo habría conseguido gracias a la ayuda de su padre como vicepresidente de Estados Unidos durante el gobierno de Barack Obama.

(LaIguana.TV)