La COVID-19 dejó en las últimas 24 horas en Francia un récord de 30 mil 621 contagios, mientras 88 personas perdieron la vida, reportó hoy una autoridad de Salud.
Según la actualización estadística de Santé Publique France, desde el 1 de marzo el país registró 809 mil 684 casos y 33 mil 125 muertes, una de las naciones más golpeadas por la pandemia.
La cifra sin precedentes de infectados explica la también inédita tasa de positividad de las pruebas de diagnóstico, situada en un 12,6 por ciento.
Además preocupan los mil 586 focos activos de transmisión de la COVID-19 y el hecho de que 84 de los 101 departamentos franceses clasifiquen de vulnerabilidad elevada frente a la enfermedad viral.
En este contexto de avance exponencial de la pandemia, el presidente Emmanuel Macron anunció anoche un toque de queda para París y otras ocho ciudades, entre ellas Marsella y Lyon, los territorios considerados por el gobierno en alerta máxima por la crisis sanitaria.
El primer ministro Jean Castex informó hoy nuevas medidas para tratar de detener la segunda ola de contagios, entre ellas la prohibición en Francia de fiestas privadas, bodas y veladas estudiantiles.
(Prensa Latina)
