La burguesía agroindustrial tradicional, agrupada en las asociaciones de Industriales de la Harina de Maíz (Venmaíz) y Molinos de Arroz (Asovema), cuestionó la reanudación del cobro de aranceles de importación sobre el maíz y el arroz, que estará en vigor hasta el 31 de enero de 2021, según anunció el presidente Nicolás Maduro el pasado 14 de octubre.
En un reporte elaborado por el portal especializado en periodismo de datos La Tabla, se señala que ese sector aduce que el arancel, cuyo monto máximo se fijó en 20% de todo lo transado, «encarecerá su materia prima», puesto que el decreto presidencial abarca todas las presentaciones de arroz «paddy, blanco a granel, empacado, harina, subproductos y derivados» y también del maíz: «a granel, en saco y derivados».
De acuerdo con esa fuente, «este segmento de la burguesía industrial (que incluye a Alimentos Polar y Monaca, que controlan la mayor parte del mercado) quiere ‘liberar’ las importaciones de materia prima y al mismo tiempo ‘protegerse’ del ingreso de productos terminados que ‘compitan’ con los suyos».
Esta competencia, al menos en el caso del maíz y su principal derivado industrial, la tradicional harina de maíz precocida, estaría representada por Leopoldo Matos, presidente de Simaca, compañía que produce la harina Doña Goya.
A este respecto, el gobernador del estado Guárico, José Vásquez, informó ayer, durante una jornada televisiva en la que se mostraron avances de la reactivación de algunas instalaciones agroindustriales en la entidad, que Matos «había financiado la siembra a pequeños productores», lo que le garantizaría el acceso a la materia prima requerida para fabricar su producto.
Esto se compadece con las declaraciones que le ofreciera el empresario al diario Últimas Noticias el pasado 8 de octubre, en las que aseguró que su compañía financió la siembra de 20 mil hectáreas de maíz para el ciclo invierno 2020″, si bien esta información, apunta La Tabla, «la ofreció con relación a la disponibilidad de materia prima para una planta aceitera a su cargo».
En el miniperfil realizado por el portal, a propósito de la pesquisa, se precisa que Matos «es un empresario de la burguesía agrícola y agroindustrial regional», devenido en «aliado estratégico» del gobierno desde 2016. Es el encargado de operaciones de «un conjunto de instalaciones agroindustriales de propiedad pública» ubicadas en Guárico y además, «es constituyente y candidato a diputado».
(LaIguana.TV)
Burguesía agroindustrial tradicional cuestiona reactivación del cobro de aranceles a importaciones de maíz y arroz.
Las asociaciones de Industriales de la Harina de Maíz (Venmaíz) y de Molinos de Arroz (Asovema) dicen que arancel de hasta 20% encarecerá su materia prima. pic.twitter.com/6s8QManMoK— La Tabla (@latablablog) October 22, 2020
Este segmento de la burguesía industrial (que incluye a Alimentos Polar y Monaca, que controlan la mayor parte del mercado) quiere «liberar» las importaciones de materia prima y al mismo tiempo «protegerse» del ingreso de productos terminados que «compitan» con los suyos.
— La Tabla (@latablablog) October 22, 2020
En declaraciones previas (publicadas el 8OCT por @UNoticias) Matos precisó que su compañía financió la siembra de 20 mil hectáreas de maíz para el ciclo invierno 2020. La información la ofreció con relación a la disponibilidad de materia prima para una planta aceitera a su cargo.
— La Tabla (@latablablog) October 22, 2020
Matos es un empresario de la burguesía agrícola y agroindustrial regional que se ha convertido en «aliado estratégico» del Estado desde 2016 y opera un conjunto de instalaciones agroindustriales de propiedad pública ubicadas en la entidad. Es constituyente y candidato a diputado.
— La Tabla (@latablablog) October 22, 2020
