Ante la derrota electoral de Donald Trump que le despoja de su fuero presidencial, le espera una serie de demandas civiles en su contra.

Desde que asumió la Presidencia de EEUU, en enero de 2017, Trump ha debido afrontar demandas civiles e investigaciones criminales en su contra.

Con la victoria del demócrata Joe Biden en los comicios norteamericanos del 3 de noviembre, conforme a las proyecciones ofrecidas el sábado por los principales medios locales, se prevé que los asuntos legales de Trump con la justicia se ahonden después del 20 de enero en cuanto pierda su aforo presidencial, según la agencia de noticias británica Reuters, que cita a varios exfiscales del país.

Demanda de un fiscal de Nueva York

El fiscal del distrito de Manhattan, Cyrus Vance, ha estado realizando una investigación criminal a Trump y su emporio.

La indagación se centra en los pagos de soborno que el exabogado de Trump, Michael Cohen, ofreció antes de las elecciones de 2016 a dos mujeres que aseguraban haber tenido encuentros sexuales con el magnte neoyorquino, algo que él niega.

Vance, militante demócrata, ha sugerido, tras presentar nuevas demandas judiciales que su investigación ahora es más amplia y podría enfocarse en el fraude bancario, fiscal y de seguros, así como en la falsificación de registros mercantiles.

Incluso, es probable que Vance obtenga autorización judicial para acceder a los registros financieros del republicano, señalaron los expertos legales al medio británico.

¿Investigaciones de evasión de impuestos del Departamento de Justicia de EEUU?

Trump enfrentaría un proceso penal, iniciado por el Departamento de Justicia de EEUU y dirigido por un nuevo fiscal general.

Algunos expertos legales han dicho que el republicano podría encarar cargos de evasión de impuestos federales sobre la renta, señalando un informe del New York Times que indica que el multimillonario pagó 750 dólares en impuestos sobre la renta tanto en 2016 como en 2017.

Nick Akerman, abogado del bufete Dorsey & Whitney y ex fiscal federal de EEUU, dijo a Reuters que hay indicios claros de fraude fiscal por parte de Trump tras la revelación de documentos incriminatorios del rotativo neoyorquino.

Al respecto, el medio recoge que Biden declinó pronunciarse sobre este asunto, diciendo que no quería interferir en las investigaciones en marcha por el Departamento de Justicia.

Investigación de fraude civil en Nueva York

La procuradora general de Nueva York, Letitia James, tiene una investigación de fraude fiscal abierta contra el mandatario y su empresa familiar, la organización Trump.

La pesquisa de James, otra militante demócrata, comenzó después de que Cohen le dijera al Congreso que Trump infló los valores de sus activos financieros para ahorrar dinero en préstamos y seguros y los desinfló, posteriormente, para reducir los impuestos inmobiliarios.

La organización Trump ha argumentado que tal caso tiene motivaciones políticas. No obstante, se trata de una investigación de ámbito civil, lo que significa que si Trump saliera culpable de un fraude fiscal, se le aplicaría penas económicas y no carcelarias.

La demanda de E. Jean Carroll

E. Jean Carroll, antigua colaboradora de la revista Elle, demandó a Trump por difamación en 2019 luego de que el presidente de EEUU negara las acusaciones de Carroll de que la violó en la década de los 90 en una tienda de Nueva York, acusándole de mentir para aumentar las ventas de un libro suyo.

En pasado agosto, un juez estatal permitió que el caso siguiera adelante, lo que significa que los abogados de Carroll podrían buscar una muestra de ADN de Trump para compararla con un vestido que ella aseguró que tenía puesta en el día de los hechos sucedidos en la tienda neoyorquina.

Lewis Kaplan, el juez federal de distrito de Manhattan, rechazó en su día una oferta del Departamento de Justicia de EEUU para sustituir a Trump por una figura jurídica del gobierno federal como acusado en el caso, por señalar que Trump no ofreció sus declaraciones sobre el caso de Carroll en el ámbito de su estatus presidencial.

Summer Zervos

El magnate también enfrenta una demanda de Summer Zervos, una concursante del programa “The Apprentice”,  producido por el conglomerado empresarial de Trump en 2005, quien afirma que el republicano la besó contra su voluntad en una reunión de 2007 y luego la tocó en un hotel.

Tras esta denuncia, el propio Trump la llamó mentirosa a Zervos, y ella lo demandó por difamación. El referido culebrón de supuesto acoso sexual se ha quedado en un segundo plano, luego de que el líder republicano dijera que es inmune a la demanda por su aforo presidencial.

(HispanTV)