Mientras los sectores políticos y mediáticos del fracasado “gobierno encargado” apuestan a que Joe Biden le dé continuidad a la política de bloqueo, medidas coercitivas unilaterales y amenazas de agresión militar de Donald Trump respecto a Venezuela, han aflorado síntomas de que las relaciones bilaterales podrían encaminarse por rutas distintas. 

El filósofo y analista político Miguel Ángel Pérez Pirela abordó el tema a propósito de una versión no confirmada de que el representante del exdiputado Juan Guaidó en Washington, Carlos Vecchio, ha sido invitado al acto de toma de posesión de Biden, el próximo 20 de enero.  

“No nos sorprendería que Biden continúe con la presión contra Venezuela, de alguna forma. Pero creemos que en el método o camino los demócratas van a distanciarse de los republicanos. El fin es el mismo, pero no los procedimientos. Esto hace pensar que esa lógica de resolver problemas de Venezuela a través de una intervención militar ya está demodé, pasada de moda”, dijo.  

Para Pérez Pirela, el hecho de que Biden no haya hablado hasta ahora de Venezuela hace pensar que hay cosas que se están discutiendo. 

“En Venezuela se instaló una nueva Asamblea Nacional y quedó fuera del juego el que se vendía como presidente encargado. La pregunta de las mil lochas es si Biden, va a apoyar a Guaidó en su ficción del gobierno paralelo. Al respecto se está dando una guerra mediática con factores internacionales que comienzan ya a avanzar informaciones que nuestro Equipo de Investigación no ha podido confirmar. Según esas versiones, Vecchio estaría presente en el acto de traspaso de mando. Si esto fuera así, no nos sorprendería porque Demócratas y Republicanos son la misma cosa cuando se trata de política exterior y sobre todo cuando se trata de América Latina”. 

Añadió que cuando el establishment de EEUU plantea que América Latina es su patio trasero, fundándose en la Doctrina Monroe, ninguno de sus integrantes se sonroja. “En la misma génesis del Estado nación está esa idea. Es una verdad indiscutible”.  

Sin embargo, personas que estuvieron en las mesas de diálogo EEUU-Cuba en tiempos de Obama dicen que el método de este presidente de EEUU fue la seducción. “Obama terminó su mandato en Cuba y bailando tango con Michelle en uno de los altos salones de Buenos Aires. La manera de actuar de los demócratas es políticamente correcta, pero el fin es absolutamente el mismo”, aseveró. 

InfoBae, portal argentino de ultraderecha, muy influyente en América Latina, ha publicado, replicando un dato de Andrés Openheimer en el diario Nuevo Herald, que Vecchio estará en la transmisión de mando. Se pretende hacer ver que hay una continuidad con las políticas de Trump.  

“Yo creo que se están dando diálogos, negociaciones entre el gobierno electo de EEUU y el de Nicolás Maduro. El enemigo de mi enemigo es mi amigo y vaya si Biden y Maduro tienen el mismo enemigo. Esto los hace amigos, sin ser ingenuos. No podemos soslayar el hecho de que Maduro fue el canciller más longevo de los gobiernos de Hugo Chávez. Además, como parlamentario, como presidente de la AN y como canciller fue muy activo en el Grupo de Boston, integrado por parlamentarios de diferentes tendencias de ambos países, en el caso de EEUU, republicanos y demócratas”, expuso el también director del portal LaIguana.TV. 

Openheimer expresó que “Biden ha dicho poco sobre Venezuela, más allá de afirmar que buscará la ayuda de países europeos para aumentar la presión sobre Maduro para que convoque elecciones libres”. 

Pérez Pirela comentó que, ciertamente, se ha dicho poco sobre Venezuela públicamente, pero se ha dicho mucho en la intimidad. Varios factores internacionales están en movimiento alrededor del tema, entre ellos Noruega, que al contrario de lo que afirman algunos analistas, no es un país pequeño, es una de las diez economías más importantes del planeta. “A ese triángulo EEUU-Venezuela-Noruega, se le suma alguna presencia del gobierno español, que no es adverso del gobierno de Venezuela. El segundo partido del gobierno de España se llama Podemos, que no es chavista, pero tiene enemigos como el PP y Ciudadanos, que son los mismos enemigos de Venezuela, de Nicolás Maduro y del gobierno bolivariano. Eso hace que haya una cierta atracción fatal entre Podemos y el gobierno de Maduro. Del lado de Podemos está Pablo Iglesias y en el del PSOE está José Luis Rodríguez Zapatero. Ese triángulo de las Bermudas, que ya va siendo un cuadrado, sumado al flamante gobierno de Biden, hace pensar que esa lógica de resolver problemas de Venezuela a través de una intervención militar ya está demodé, pasada de moda”, subrayó. 

Openheimer dijo que la invitación ‘al embajador Vecchio’ es una primera señal de que Biden continuará con la misma política de Donald Trump –prosiguió-. A mí me parece una frase típica de un lobista sionista, pues bien se sabe que Openheimer es una figura que respalda al gobierno de Israel. Biden, aunque sea solo por diferenciarse, va a desarrollar una política distinta, sobre todo su recordamos que el presidente Maduro aseguró recientemente que Obama le confesó que había sido un error suyo emitir la orden ejecutiva que caracteriza a Venezuela como una amenaza inusual y extraordinaria contra la seguridad nacional de EEUU, instrumento que luego utilizó Trump para una escalada de medidas coercitivas unilaterales y para bloquear al país”. 

Añadió que la ovación que recibió Guaidó en el Capitolio en 2020 fue bipartidista, pero eso no implica que Guaidó vaya a ser aceptado automáticamente por Biden. Esperemos anuncios concretos porque una cosa es el ser y otra es el aparecer. Filosóficamente hablando el ser es ontológico y el aparecer es político”. 

Pérez Pirela admitió que Biden tuvo expresiones duras contra Maduro, durante la campaña electoral, pero hizo ver que sus dichos como candidato, no necesariamente significan que actuará así en el gobierno. “Esas expresiones tienen que ser inscritas en la voluntad manifiesta de conseguir votos como candidato. En Venezuela se dice que ‘candidato no es gente’. Pero ya Biden no es candidato, sino presidente. Hay que analizar otros factores, que hacen pensar que vienen tiempos de diálogo, de distensión, como diría el gran teórico de la guerra, Karl Von Clausewitz, la política es la guerra continuada por otros medios. Ahora tienen otros medios para llegar a una especie de mediación que permita una cierta tranquilidad hemisférica y en este sentido Cuba y Venezuela son actores fundamentales”. 

Recordó que en febrero de 2019, Biden instó a la comunidad internacional a apoyar a Guaidó (cuando acababa de autoproclamarse) para lograr una transición. Por eso, el enviado especial de Trump contra Venezuela, Elliott Abrams, asegura que Biden seguirá apoyando a Guaidó. “Pero aquí se va a un jugar Europa como elemento fundamental. Europa asumía las posturas de Trump tapándose la nariz. Con Biden será distinto, aunque no quiere decir que el nuevo presidente sea mejor”. 

“Abrams dice que el futuro gobierno demócrata entiende que la cara y el líder de la oposición es Guaidó. Lo que está claro y evidente es que los protagonistas de la oposición serán aquellos que muestren inteligencia emocional para llevar a Maduro a unas elecciones que a ellos les convengan”. 

El presentador llamó la atención acerca de Juan González, el Director de Asuntos del Hemisferio Occidental del Consejo de Seguridad Nacional, quien pasará a ser uno de los personajes clave de EEUU en América Latina. Consultado sobre las diferencias entre demócratas y republicanos en torno a Venezuela, dijo que “la destreza diplomática de Guaidó es que ha sido el campeón del bipartidismo de la política de EEUU hacia Venezuela”. 

Sin embargo, el mismo funcionario, nacido en Colombia y nacionalizado estadounidense, ha criticado duramente las políticas de Trump, indicando que han sido contraproducentes para el pueblo venezolano en Venezuela y en EEUU 

Pidió tener muy en cuenta a González, quien de seguro será una ficha importante del gobierno de Biden para la región, pues ya estuvo en el de Obama y también ejerció cargos diplomáticos en Guatemala. “Ojalá no caiga en la tentación (no sé cuál es su relación con Uribe, lo investigaré) de repetir las políticas trasnochadas de Trump”, manifestó. 

Pérez Pirela dedicó algunos minutos a analizar la situación en la que ha quedado el secretario de la Organización de Estados Americanos, Luis Almagro, tras la caída en desgracia de Trump. “Almagro reconoció que a Guaidó lo dejaron solo. Es una especie de mea culpa. Se está cayendo a latigazos como los santos medievales. Dijo que ‘la presión nunca llegó a los niveles que debió haber llegado para hacer sentir incómodo al gobierno venezolano y obligarlo a aceptar una salida’”. 

“Para Almagro no bastó la intentona de magnicidio, unos drones para hacer explotar una tarima en la que además de Maduro estaba el alto mando civil y militar de Venezuela, todo el Estado venezolano. Tampoco bastó inventarse un seudoconcierto en la frontera para intentar una invasión. No bastó que en medio de una pandemia se tratara de hacer una invasión con mercenarios boinas verdes con experiencia en Irak. La declaración de Almagro deja a un lado las consecuencias negativas de las sanciones que han agravado la crisis económica y el sufrimiento de la población, que es un hecho cotidiano. Son delitos de lesa humanidad”, acusó.  

“Insistió en que los efectos de la derrota política de Trump no tardarán en verse en América Latina. Ya Gustavo Petro, en Colombia, está subiendo como la espuma, y Lula Da Silva, en Brasil, sigue en ascenso. En cuanto a Guaidó, si quieren medir su desgracia, vean lo que dicen los medios que antes lo apoyaban en EEUU, España, Colombia, Argentina. Recientemente, luego de la juramentación de la nueva AN, la Unión Europea le retiró el reconocimiento a Guaidó. Esto es algo que pasó por debajo de la mesa porque a los europeos, me consta personalmente porque viví allá once años, les cuesta reconocer que se equivocaron”. 

Mencionó las declaraciones del jefe diplomático de la Unión Europea, Josep Borrell, quien aseguró que la UE mantendrá su compromiso con todos los actores políticos y de la sociedad civil que luchan por devolver la democracia Venezuela, en particular Juan Guaidó y otros representantes de la asamblea nacional saliente. 

Expresó que al analizar las palabras específicas utilizadas por Borrell se aprecia el peso que tiene en esta frase la palabra “saliente”, que evidencia que la UE entiende que la AN electa en 2015 ya no está vigente. “Es como cuando decimos esto, eso y aquello, dependiendo de qué tan cerca esté de quien habla. Guaidó está fuera del juego político, es un muerto viviente como los personajes del video de Michael Jackson”. 

Citgo: más corrupción

Hizo un apartado especial para abordar el tema de Citgo, empresa de la que se apropió el gobierno de Donald Trump con la complicidad del llamado gobierno encargado.  

“Citgo era la empresa más importante que tenía Venezuela en el exterior, con refinerías y estaciones de servicio en EEUU. Ayudaba a causas humanitarias, sobre todo en el campo de la salud. Fue robada por Donald Trump a través de Guaidó. Ahora, este último anuncia que ha designado a José Ramón Pocaterra era un nuevo miembro de la Junta Directiva de Citgo. Este personaje fue retratado por los medios afines a Guaidó como un un profesional del área financiera. Su experiencia profesional incluye varias posiciones en el grupo de Planificación Financiera para Sincrudos de Oriente (SINCOR), una empresa conjunta entre Petróleos de Venezuela (PDVSA), TOTAL y EQUINOR para las operaciones de desarrollo de petróleo extrapesado en la Faja del Orinoco en Venezuela, inicialmente en la Unidad de Mejoramiento y luego en las oficinas corporativas a cargo del área de Control Financiero y Presupuestario. 

“Por casualidad, ¿qué tendrá que ver el nombre Rafael Ramírez en esto? –se preguntó Pérez Pirela-. Como otros funcionarios ‘designados por Guaidó, Pocaterra ha trabajado antes a favor de los intereses de EEUU, en su caso a través de firmas como Energy Logistics, Inc. y Swift Oil & Gas. También se desempeñó como gerente de finanzas de MSO Venezuela, una cuestionada contratista petrolera de Petrocedeño, empresa mixta de la Faja del Orinoco, que maneja uno de los mejoradores de crudo extrapesado”, según la plataforma de periodismo de datos La Tabla.  

Este portal cita a un vocero de la industria en la Faja, quien afirma que MSO fue creada hace unos cinco años y la investigaron varias veces pero pagaba sobornos para evitar acciones judiciales.  

“Es decir, que este señor Pocaterra también comparte la vena corrupta de las otras directivas de Guaidó y esto da pie para hablar de Monomeros, otra empresa que Venezuela tenía en el extranjero, específicamente en Colombia. Monómeros fue dividida en cuatro partes entre cada uno de los partidos de la extinta AN, los del llamado G-4: Voluntad Popular, con Guaidó y Leopoldo López;  Primero Justicia, con Julio Borges, Miguel Pizarro, etcétera; Acción Democrática, a través de Henry Ramos Allup, que ya no tiene el partido, por cierto, por decisión del Tribunal Supremo de Justicia; y Un Nuevo Tiempo, de Manuel Rosales. Los directivos de esta empresa no fueron escogidos por sus capacidades y mucho menos, sino por una repartición partidista… imagínense ustedes”, reveló.  

Comentó que el presidente Nicolás Maduro quien no desaprovechó la oportunidad de la presentación de su Memoria y Cuenta, en el seno de la flamante Asamblea Nacional instituida el 5 enero, para pedir al Poder Legislativo que las acciones de Guaidó no queden impunes. 

Calificó de pertinente esa solicitud, pues es un clamor popular. “Si tuviera que escoger la pregunta fundamental que los participantes de Desde Donde Sea vienen haciendo cotidianamente desde hace meses, sería justamente ¿cuándo van a enjuiciar a Guaidó? Yo no tengo la respuesta, la tiene la justicia venezolana”.  

En la AN, Maduro dijo que “los años en que la AN estuvo bajo la conducción opositora fueron un quinquenio de traición y crueldad» y por eso pidió que sus autoridades, en especial Juan Guaidó, «no queden impunes». 

Aseguró que Guaidó, todavía reconocido como «presidente encargado» por Estados Unidos y otros gobiernos, aceptó pagar 220 millones de dólares por su asesinato.  Durante 2020 se registraron más de 400 acciones orientadas a socavar la institucionalidad». 

Añadió que “la política de Donald Trump ha sido la de perseguir de forma criminal las cuentas venezolanas, nos han robado más de 43.000 millones de dólares. Esto ha ocasionado un saldo dramático en la vida social del pueblo venezolano». 

Otro dato aportado por el jefe del Estado fue que “la producción de la petrolera estatal PDVSA, fuente de más del 90% de las exportaciones del país, cayó un 69%. «Duramos 13 meses sin vender una sola gota de petróleo al mundo, pero aun así pudimos mantener la inversión social, con la producción 400 mil toneladas de alimentos». 

Pérez Pirela solicitó a su audiencia realizar un ejercicio con el ingreso familiar, consistente en suponer que baja repentinamente en la misma proporción en que han caído los ingresos nacionales. ¿Cómo enfrentar esa situación?  

“Los amigos que están en otros países a menudo nos preguntan por qué el gobierno de Maduro no ha caído. Les decimos que es porque con lo poco que se tiene no se deja a un lado la inversión social, ello a pesar de la influencia negativa de la corrupción y la ineficiencia. Les decimos que se ha hecho así porque reducir la inversión social sería un suicidio para un gobierno socialista, progresista, de izquierda, o como queramos llamarlo. Si no lo hubiese hecho, ya no sería gobierno”. 

Sobre Guaidó, Maduro añadió en su discurso que “vemos al usurpador usando el Palacio Federal Legislativo para mentirse a él y a su grupito que lo sigue, porque la realidad es que ni los venezolanos ni la comunidad internacional les cree” 

Pérez Pirela dijo coincidir con esta apreciación del mandatario pues, en su concepto, la ficción de de Guaidó se convirtió en un efecto bumerán. 

El análisis de un encuestador opositor

En el tramo final del programa, Pérez Pirela citó y desglosó ampliamente un artículo del encuestador Jesús Seguías, militante opositor, en el que asegura que Venezuela está sin un liderazgo confiable y existen las condiciones para la insurgencia de nuevos actores. 

Según Seguías, “los venezolanos tenemos el reto y la obligación de derrotar de manera urgente siete mega crisis simultáneas: la política, la económica, la de servicios públicos, la social, la emocional (quizás la peor de todas), la ética, y ahora la de la pandemia. Este cuadro nos convierte en uno de los países más vulnerables de la Tierra”. 

Pérez Pirela analizó el planteamiento y dijo que es necesario preguntarse ¿por qué estas megacrisis no existían en 2006, cuando los venezolanos eran aplaudidos en los aeropuertos de otros países porque iban con mucho dinero para gastar? “¿Será solo por el precio del petróleo? Debemos tener en cuenta que los bloqueos y las sanciones se han aplicado expresamente para impedir que funcione el socialismo. Parte de esta megacrisis ha sido propiciada por EEUU y países de la Unión Europea”. 

Otra opinión expresada por Seguís en su artículo es que “la crisis que conmueve a la nación no es un fenómeno coyuntural. Trasciende inclusive a la gestión de gobierno de Chávez y Maduro. La crisis política y la crisis ética, por ejemplo, son problemas de nación, nadie es ajeno a ellas, y no comenzaron con el chavismo en el poder. Vienen de mucho antes”. 

“Coincido con esto –acotó Pérez Pirela-. Nos hemos acostumbrado a echarle la culpa al gobierno o a la oposición, sin señalarnos a nosotros mismos, sin ver los vicios morales del pueblo, que son los mismos de todos los pueblos. En la IV República se decía ‘no me den, pónganme donde haiga’ y en la V República nos hemos equivocado creyendo que el Estado debe darnos de todo”. 

También expresó Seguías que “los tradicionales políticos de oficio están siendo desplazados hoy día por militares, empresarios, productores de coca, sindicalistas, sacerdotes, cómicos, cantantes, en fin, por políticos improvisados que generalmente fracasan en su pasantía por el poder. Los nuevos actores que están irrumpiendo en el escenario político, y prestos a llenar el vacío dejado por dirigentes decadentes que no asimilan que el poder ahora tiene un nuevo rostro y nuevos actores”. 

Pérez Pirela afirmó estar de acuerdo, pero advirtió que se trata de una reflexión desfasada en 20 años. “Este tema lo traté hace ya varios años en mi libro Del Estado posible. Cuando cayeron los partidos políticos, la derecha no tuvo otra opción que sacar a las modelos, a los gordos beisbolistas proyanquis, a los locutores como Chataing y Erika de la Vega, a las actrices de telenovelas. Y frente a ese cuadro, una bestia política como Chávez se los comió vivos, hizo parrilla con ellos”. 

Prosiguió revisando lo dicho por el encuestador, quien asegura que 88% de los venezolanos dice no confiar en los actuales políticos de oficio, ni los del gobierno ni los de la oposición, lo que coloca al país en un escenario parecido al que existía en la década de los noventa, antes de la victoria de Chávez. A su juicio, es necesario construir una nueva mayoría porque la polarización política, entre chavistas y opositores, en la cual estuvo imbuido el país durante los últimos 22 años, ya caducó, no es real ni interpreta a la Venezuela actual. Un poco menos de la mitad del país (47%) pertenece a un bloque conformado por chavistas y opositores que optaron por una confrontación radical para hacer valer sus propósitos políticos. Y en el bloque opositor hay mucho cuestionamiento hacia la actuación de sus líderes. En el chavismo la procesión anda por dentro. 

Pérez Pirela se preguntó si eso último es malo o bueno. “Para mí es bueno porque el último mensaje de Hugo Rafael Chávez Frías fue unidad, lucha, batalla y victoria. Es imposible para el chavismo una victoria sin unidad. La diferencia fundamental entre chavismo y oposición es que el chavismo se ha mantenido unido. La oposición se ha dividido a un punto tal que ya es imposible incluso ir a una elección. Así que, en mi opinión, decir que la procesión va por dentro es una flor y no una crítica para el chavismo” 

Basándose en una encuesta de noviembre de 2020, Seguías asegura que La otra mitad de los venezolanos (50%) se siente ajena al chavismo y a la oposición, y rechaza la confrontación radical. Más aún, 60% de los venezolanos exige acuerdos negociados entre ambos factores y unidad nacional para resolver los principales problemas del país. En su trabajo, Seguías le atribuye a Elliott Abrams, haber dicho que “esto terminará pronto en una mesa de negociación  y hay que negociar con los que estén allí, no con los que uno quiera negociar”. 

El moderador de Desde Donde Sea reiteró algo que ha dicho muchas veces: los problemas de Venezuela no son económicos, sino políticos. Como demostración dijo que, aparte de la ya conocida condición de primera reserva estratégica de petróleo del planeta, el país cuenta con muchas otras potencialidades y mencionó el caso del oro que, según los datos más recientes, no solo abunda en el Arco Minero del Orinoco, sino incluso en la zona central del país, en entidades tan cercanas a la capital como el estado Aragua. 

Maduro como vencedor de Trump

Uno de los aspectos más significativos de las opiniones de Seguías es, de acuerdo al criterio de Pérez Pirela, que el encuestador opositor da por hecho que Nicolás Maduro le ganó la pulseada a Donald Trump. Por ello se pregunta si después de derrotar a Trump, Maduro tiene interés y razones para negociar con los factores opositores. “¿Cuál es el incentivo que tiene Nicolás Maduro para negociar, tomando en cuenta que salió victorioso ante Trump y los opositores en su empeño por sacarlo del poder, y que aún sigue contando con el apoyo de China y Rusia? Sin duda Maduro se siente en ventaja. De hecho, Trump salió primero del poder que Maduro”, expresó. 

Seguías plantea que en este momento, a diferencia de los tiempos cuando se dialogó en Santo Domingo y Barbados, “para que sea exitosa una negociación, esta debe contar como garantes de los acuerdos a las cuatro grandes potencias del mundo: China, Rusia, Europa y Estados Unidos, lo cual haría muy difícil la violación de los acuerdos. En Santo Domingo, los garantes eran pequeños países. En Barbados, los noruegos estaban casi solos”. 

Pérez Pirela hizo una observación a las opiniones de Seguías: no puede decirse que Noruega sea un país pequeño, pues tiene un gran peso como economía en el escenario mundial y una larga tradición como país facilitador de acuerdos de paz. 

Según el encuestador, Biden cambiará la torpe estrategia de Trump respecto a Venezuela. “Se prevé una gran sinergia entre los Estados Unidos, Europa, el Vaticano, y todo el Grupo de Lima para negociar una salida electoral en Venezuela, quedando descartada la expulsión previa de Maduro del poder como condición para negociar. El ‘cese de la usurpación’ feneció, lo cual libera el juego atascado. Las realidades se impusieron”, sentenció.  

A modo de conclusión, Pérez Pirela dijo que tal vez la derrota de Trump haga finalmente que se entienda que el chavismo no es un detalle de la historia, como diría Karl Smith, sino una fuerza estructural que hace parte de la idiosincrasia y la cultura política de Venezuela. “Quien quiera gobernar en Venezuela sin el chavismo, tendrá que llevar a cabo un genocidio peor que el de Hitler”. 

Advirtió que quienes están participando en el debate político cada vez son menos. Por lo cual, la única opción que tiene Venezuela es sumar, aunar al debate político a los científicos, los artistas, los obreros, los artesanos. Si nosotros dejamos que la política quede exclusivamente en manos de los políticos, esto no va para ninguna parte. Recordemos y eso es un hecho, no es una interpretación política de Miguel Ángel Pérez Pirela, que la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela plantea una democracia participativa y protagónica en la cual nosotros no delegamos el poder político en representantes, sino que asumimos el poder, criticando, actuando en el devenir político de Venezuela. Los politiqueros de un lado y del otro nos están tratando hacer olvidar esto. Tenemos que regresar a nuestra Constitución, que nos plantea una democracia participativa y protagónica, donde nosotros, los ciudadanos de a pie, tenemos muchísimo que aportar”. 

(LaIguana.TV)