A juicio del filósofo y comunicador Miguel Ángel Pérez Pirela, las elecciones presidenciales en Ecuador, que están pautadas para el próximo domingo 7 de febrero, son de gran importancia política y económica para toda Latinoamérica.

Así lo manifestó durante la transmisión de este martes 2 de febrero de su programa Desde Donde Sea, que se emite de lunes a viernes a las 7:00 de las noche, a través de las redes sociales de LaIguana.TV, y en el que analizó el proceso comicial que se deberá desarrollar en el citado país suramericano.

Señaló que este proceso debe abordarse en el contexto con las elecciones presidenciales celebradas a finales del año pasado en Bolivia, Estados Unidos y las parlamentarias en Venezuela.

“Hay todo un itinerario electoral en Latinoamérica que es muy importante para el devenir sociopolítico y económico de la región. En este contexto las elecciones en Ecuador revisten una importancia que se escapa de vista. Todo el mundo está pendiente que no pase en ese país, lo que ocurrió en Bolivia porque la OEA (Organización de Estados Americanos) tiene sus garras metidas y están tratando de suspender las elecciones”, apuntó.

En este sentido, precisó que en esa nación “se está jugando en estos momentos el destino de toda la región. Lenín Moreno traicionó a Rafael Correa, que terminó su mandato presidencial y se va a Bélgica. No es una práctica latinoamericana dejar el coroto. En Latinoamérica no se deja prestado ni al cuido el poder”.

Recordó que durante su mandato, el expresidente Correa, economista de profesión y con doctorado en la materia, “logró un milagro económico en Ecuador, como lo hizo Evo Morales en Bolivia. Aun así a Evo le dieron un golpe de Estado”.

Destacó que, a su juicio, Correa cometió un error al confiar en Moreno. “Él termina el mandato y, en una forma un tanto ingenua, delegó el coroto a Moreno. ¿El resultado? Moreno terminó dándole un golpe de Estado a quien lo llevó al poder y metieron al pueblo ecuatoriano en una especie de callejón sin salida. Lenin Moreno terminó descarrillando la Revolución Ciudadana ecuatoriana”.

Hizo énfasis en las denuncias que ha hecho en las últimas horas Rafael Correa, sobre el intento de la derecha de suspender las elecciones.

“Las formas de golpe de Estado, de desestabilización están cambiando en Latinoamérica. Ahora ni siquiera quieren que se hagan elecciones. Es el caso de lo ocurrido en Venezuela, en Bolivia. Recuerden que Jeanine Áñez quería suspender las elecciones porque sabía que iba a perder. Fue lo mismo que trató de hacer la oposición venezolana en diciembre. Ahora en Ecuador están tratando de suspenderlas. Es la nueva metodología conservadora de la derecha latinoamericana, la que supuestamente lucha por la democracia, pero sin elecciones”, dijo.

El también escritor recordó que el próximo domingo los ecuatorianos elegirán al Presidente y al Vicepresidente para el período 2021-2025. También se elegirán los cinco representantes al Parlamento Andino y a los 137 miembros de la Asamblea Nacional.

“Este proceso está caracterizado por una apatía generalizada del pueblo, debido al descontento social por los desaciertos en la política económica y sanitaria del gobierno de Moreno. Ecuador ha sido uno de los países que más ha sufrido por el tema de pandemia”, aseguró.

El conductor de Desde Donde Sea recordó que Lenín Moreno ha sido uno de los mandatarios de la región que más activamente ha participado en la conspiración contra Venezuela. Es uno de los que “apostaba a que se diera una crisis sanitaria en Venezuela. Lo que él, (Iván) Duque, (Jair) Bolsonaro, le desearon a Venezuela, lo están viviendo ellos en sus países. No hay que desearle mal a nadie”, subrayó.

Analizó los resultados de la encuesta elaborada en diciembre del año pasado por el Centro Estratégico Latinoamericano de Geopolítica (Celag), y que da luces sobre el por qué la derecha de Ecuador apuesta a suspender los comicios del próximo domingo.

“La intención de voto nos puede dar luces. Según el Celag, Andrés Arauz tiene 36,5 por ciento, Álvaro Noboa, 22,9 por ciento; Yaku Pérez, 21,2; Guillermo Lasso, 13,6; y Ximena Peña, que es la candidata respaldada por Lenín Moreno tiene apenas 1,2 por ciento de los votos”, señaló.

Con la derecha

El analista político aseguró que una vez que Lenín Moreno llegó al poder, comenzó a gobernar junto a la derecha. “Él destruyó la economía ecuatoriana. Ecuador está pasando en estos momentos por una gravísima crisis económica, política, social y sanitaria. Destruyó Ecuador en sus bases, en su política”.

Destacó que la pandemia y la corrupción son dos de los factores que podría influir en los resultados finales de dichos comicios.

“Aunque no se quiera hablar de esto, la pandemia es uno de los factores electorales. 2020 fue el año de los cadáveres abandonados en las calles en Guayaquil, de los ataúdes de cartón, de las bolsas para cadáveres pagadas con sobreprecio y que retrataron el colapso total del sistema sanitario y funerario en manos de la gestión de Moreno. Esta realidad genera polémica. Ecuador es uno de los países con recepción de recursos de parte de la llamada ayuda de organismo multilaterales, a diferencia de Venezuela o Cuba, que son países bloqueados y tienen mejores cifras que Ecuador, Perú, Brasil, Chile en el manejo de la pandemia”, sentenció.

Refirió además que “no cabe duda de que la pandemia le ha quitado la máscara a todo el mundo. Si usted quería saber cuál es la naturaleza humana de un gobierno, de un político, de un familiar, de un amigo y hasta de un enemigo, la pandemia está poniendo los puntos sobre las íes”.

A lo Fernández

Pérez Pirela destacó en su análisis que el expresidente Rafael Correa intentó hacer lo mismo que hizo Cristina Fernández en Argentina en 2019, al presentarse como candidata a vicepresidenta en llave con Alberto Fernández para las elecciones presidenciales. Sin embargo, “Lenín Moreno utilizó la justicia para impedirlo e inhabilitarlo por 25 años”.

“La persecución política en Latinoamérica a través de instrumentos jurídicos debe acabarse. Está muy de moda en gobiernos de derecha y de izquierda. Paradójicamente está impidiendo a candidatos postularse a puestos políticos, pero lo más paradójico es que gobiernos derecha y de izquierda cuando tiene las pruebas para meter presos a sus adversarios, no hacen nada por presiones de los Estados Unidos o de la Unión Europea. ¿Cómo es esto? Perseguimos algunas veces sin razón alguna a dirigentes, pero cuando tenemos las pruebas en la mano para judicializar a un político resulta que no lo aplicamos por miedo a lo que podría pensar o decir la Unión Europea o los Estados Unidos. Es paradójico”, expresó.

En este sentido, el filósofo precisó que lo que ocurre actualmente en Ecuador y el intento de las derechas por suspender elecciones en Bolivia y Venezuela, es evidencia de lo “frágil que en estos momentos son los procesos electorales en Latinoamérica. Si bien es cierto que estábamos acostumbrados a golpes de Estados militares, por parte de las derechas guiadas por los gringos, ahora se está tratando de boicotear los procesos electorales en los que resultarían ganadores movimientos electorales progresistas y de izquierda”.

Destacó en este contexto que uno de los retos del continente es “entender la importancia de las elecciones, de la creación de partidos políticos fuertes, de la formación de líderes políticos alternativos. La tecnocracia de Washington quiere escoger a los presidentes en América Latina, cada vez que se ven mermados en las encuestas”.

Afirmó que el resultado de los comicios del próximo fin de semana, pudiera significar el reimpulso de “los movimientos de integración que nos permita hacer frente a las arremetidas de las derechas, de Estados Unidos y de la Unión Europea, y que tienen como nueva metodología evitar elecciones en América Latina para evitar que movimientos de izquierda o progresistas lleguen al poder”.

“Es mucho lo que en este momento se está jugando en América Latina. Estamos viviendo momentos trascendentales, decisorios, que han de determinar el devenir de nuestra región”, precisó.

 Golpe a la ultraderecha

Uno de los puntos que tocó al final de su programa, ante la insistencia de los usuarios, fue la decisión tomada por la administración de Joe Biden, que autoriza operaciones en aeropuertos y puertos de nuestro país.   

“Es un golpe certero a las sanciones contra Venezuela y es un mensaje político de Joe Biden. No seamos ingenuos, pero sí leamos los signos”, apuntó, al tiempo que expresó que “cuando hay negociaciones los micrófonos están apagaditos”.

“La prioridad de los Estados Unidos no es Venezuela, no se equivoquen. Es un golpe muy duro para Juan Guaidó, Leopoldo López, Julio Borges, Miguel Pizarro. Esto es fruto de negociaciones?, ¿es por eso que Juan Guaidó no está preso?, ¿será que Guaidó pasó a ser una moneda de cambio?”, acotó.  

(LaIguana.TV)