Ecuador suspendió la emisión de visados de residencia Unasur, una de las posibilidades hasta ahora al alcance de los venezolanos en el país, tras la entrada en vigor de una reforma de la Ley Orgánica de Movilidad Humana, informó este viernes la Cancillería ecuatoriana.

En un comunicado oficial el Ministerio de Relaciones Exteriores precisó que una vez promulgada la Ley Orgánica Reformatoria de la Ley Orgánica de Movilidad Humana, el 5 de febrero, «ha quedado derogado el capítulo VI, relativo a los visados de residencia Unasur, tanto temporales como permanentes».

400.000 migrantes, un tercio regularizados

La cartera exterior indicó que seguirán tramitándose las solicitudes de residencia Unasur presentadas antes del 5 de febrero, pero que desde entonces y en adelante «no se recibirán ni tramitarán solicitudes de visado de este tipo».

Recomienda asimismo a los extranjeros que deseen solicitar cualquier otro tipo de visado de residencia en Ecuador que revisen la oferta de distintos tipos de visa a su disposición en la página web del Ministerio: https://www.cancilleria.gob.ec/.

El visado de residencia Unasur estaba disponible desde 2017 y permitía a los migrantes provenientes de otros países de América del Sur, en particular a venezolanos, establecerse de forma temporal en el territorio ecuatoriano.

Con un costo de 250 dólares, incluida la gestión, y con una vigencia de dos años, sus portadores podían mantener una estadía regular en el país y optar con ello a un puesto de trabajo y acceso a la salud.

Se estima que en Ecuador se encontraban antes de la pandemia cerca de 400.000 migrantes venezolanos, cifra que ha podido fluctuar debido a la alta movilidad de este colectivo humano tanto de regreso a su país como en tránsito hacia otros destinos en el cono sur.

Daniel Regalado, presidente y representante legal de la Asociación Civil Venezuela en Ecuador AC, explicó a Efe que se conocía la medida incluida en la reforma de la ley, pero ha sido poco socializada entre la comunidad migrante.

«El Gobierno tiene que hacer una campaña para informar a los extranjeros del nuevo cambio. Hay un completo limbo para la diáspora venezolana», valoró.

La decisión tendrá consecuencias para los migrantes, después de que Ecuador cerrara el año pasado y en plena pandemia un proceso de regularización humanitaria.

«Por lo que entendemos, se temen procesos administrativos de deportación, tanto para los que pasaron de manera ilegal, como regular con una carta andina o pasaporte vencido y que no disponen de una visa», remarcó.

(EFE)