El rover Perseverance de la NASA aterriza en el suelo marciano. La maniobra consiste en tres fases: la entrada, el descenso y el aterrizaje.

Según la agencia espacial, durante el aterrizaje, el rover se precipitará a través de la fina atmósfera del planeta, con un escudo térmico primero, a una velocidad de unos 20.000 km/h, antes de que un paracaídas y un descenso motorizado reduzcan la velocidad del rover a unos 3,2 km/h.
 

Al final, una gran grúa aérea hará descender el rover con tres cuerdas para que aterrice suavemente sobre seis ruedas en el cráter Jezero, un gran cráter de impacto de unos 45 kilómetros de ancho, justo al norte del ecuador marciano.

La misión marciana de la NASA, lanzada en julio de 2020, tiene como objetivo buscar signos de vida microbiana antigua y trazar la geología y el clima del planeta rojo.
 

(Sputnik)