El exdiputado opositor Julio Borges reconoció este miércoles 24 de febrero que sus planes políticos disfrazados de “ayuda humanitaria” ahora se verán afectados, luego de que el Gobierno nacional declarara persona non grata a la representante de la Unión Europea en Caracas, Isabel Brilhante Pedrosa.
“Rechazamos que la dictadura pretenda expulsar a la embajadora de la UE y cerrar las oficinas en Venezuela como retaliación a las sanciones impuestas contra 19 cómplices del régimen”, escribió Borges en su cuenta en Twitter.
A su juicio esta decisión provocaría en el país “la suspensión inmediata de programas de ayuda humanitaria, lo cual afectaría a cientos de ciudadanos venezolanos que hoy sufren las consecuencias del Estado fallido de Maduro”.
El presidente de la República, bajo el sentido de reciprocidad y haciendo justicia ante la injerencia de la UE, declaró este martes 23 de febrero persona non grata a Brilhante Pedrosa.
Cabe recordar, que este lunes 22 de febrero, el Consejo de la UE lanzó una nueva sanción política contra el país, esta vez, a 19 funcionarios venezolanos, entre ellos diputados, gobernadores, militares, ministros entre otros, supuestamente por haber “violado la democracia”, luego de que el Ejecutivo se negara a repetir las elecciones parlamentarias del 2020, lo cual no es necesario porque transcurrieron con total normalidad y apegada a las leyes, pese al descontento de la UE.
(LaIguana.TV)
Rechazamos que la dictadura pretenda expulsar a la embajadora de la UE y cerrar las oficinas en Vzla como retaliación a las sanciones impuestas contra 19 cómplices del régimen. Además, anuncian la inhabilitación de 28 diputados de la AN legítima, donde nos incluyen nuevamente.
— Julio Borges (@JulioBorges) February 24, 2021
El cierre de las oficinas de la UE provocaría la suspensión inmediata de programas de ayuda humanitaria, lo cual afectaría a cientos de ciudadanos venezolanos que hoy sufren las consecuencias del Estado Fallido de Maduro.
— Julio Borges (@JulioBorges) February 24, 2021
Esto solo aislará más a Maduro y recibirá un enérgico repudio del mundo libre. La presión democrática internacional es una respuesta a la destrucción de las libertades en el país, al empeño de impedir elecciones libres. No cesará hasta tanto no se restablezca la democracia.
— Julio Borges (@JulioBorges) February 24, 2021