Los aficionados de otros países no podrán acudir a los Juegos Olímpicos de Tokio, que se disputan este año entre el 23 de julio y el 9 de agosto, debido a los riesgos sanitarios ligados a la COVID-19, anunciaron este sábado los organizadores. 

“Tomando como base la situación actual de la pandemia, es altamente improbable que la entrada en Japón estaría garantizada este verano (boreal) para gente procedente del extranjero”, explicaron los organizadores en un comunicado. 

“Y en orden de ofrecer claridad a los poseedores de entradas que viven en el extranjero y permitirles que puedan ajustar sus planes de viaje en este momento, las partes desde el lado japonés han llegado a la conclusión de que esas personas no podrán entrar en Japón en ese tiempo de los Juegos Olímpicos y Paralímpicos”, añade el texto.  

El Comité Olímpico Internacional (COI) y el Comité Paralímpico Internacional (CPI) “respetan totalmente y aceptan esta conclusión”, señalan además los organizadores, añadiendo que los detalles de devolución del dinero serán difundidos pronto. 

El presidente del COI, el alemán Thomas Bach, dejó entrever la decisión este sábado al inicio de la reunión entre los organizadores, las autoridades japonesas y los responsables de los comités olímpico y paralímpico, avisando de que “decisiones difíciles” serían necesarias para fortalecer la seguridad. 

La decisión había sido ampliamente anticipada en las últimas semanas, con filtraciones sugiriendo que los organizadores pensaban que una prohibición de entradas a visitantes procedentes del extranjero es la única opción, cuando trabajan para hacer unos Juegos Olímpicos seguros pese a la pandemia. 

El COI había planteado excepciones para determinados invitados extranjeros, pero las reglas serán probablemente estrictas. 

La responsable del comité organizador de los Juegos de Tokio, Seiko Hashimoto, admitió que incluso será “difícil” que acudan los familiares de los deportistas que participen. 

Ahora, los organizadores deberán decidir cuántos espectadores locales podrán asistir a las pruebas. 

Los organizadores habían sugerido en un principio que tratarían este tema alrededor del mes de abril, pero Thomas Bach ha afirmado que la decisión será posiblemente aplazada a una fecha próxima a la jornada de inauguración, el 23 de julio. 

(AFP)