Hungría sufrió unas verdaderas agresiones políticas por las negociaciones sobre la adquisición de la vacuna rusa contra el coronavirus Sputnik V y la china Sinopharm, afirmó el ministro de Exteriores húngaro, Peter Szijjarto, en entrevista con el canal RT.

El propio ministro se vacunó con anterioridad con el fármaco Sputnik V.

«Cuando se dio a conocer que vamos a negociar la adquisición de Sputnik V y Sinopharm, sufrimos un gran ataque político», afirmó Szijjarto.

El titular destacó que para su país la vacuna no es la cuestión de ideología, sino algo imprescindible par salvar las vidas de los húngaros.

«Nos atacaron porque miramos hacia el Este en vez de mirar hacia el Oeste cuando se trata de adquisición de vacunas», subrayó Szijjarto.

Además de Sputnik V, Hungría aprobó las vacunas AstraZeneca Sinopharm. En el país se usan también las vacunas Pfizer y Moderna, aprobadas a nivel de la UE.

(Sputnik)