En imágenes grabadas desde las regiones vecinas al volcán durante la madrugada, además de ver los chorros de lava siendo lanzados hacia el cielo, es posible también escuchar los altos estruendos causados por las erupciones. 

A las 02:35 GMT el Observatorio Etneo del Instituto Nacional de Geofísica y Vulcanología (INGV) informó acerca de «un desbordamiento de lava desde el cráter sureste» del volcán.  

En comunicados posteriores, el ente detalló que existían dos flujos de lava, uno más grande y otro de menor tamaño. Sin embargo, la fuente de lava en el cráter cesó con la llegada de la mañana, según el INGV. 

Según los pronósticos del organismo, la nube eruptiva producida por la actividad volcánica se dispersa en dirección sur-sureste a unos 4,5 kilómetros sobre el nivel del mar. Durante la noche se informó de una recaída de cenizas en las localidades sicilianas de Milia y Trecastagni. 

Además, se registraron temblores volcánicos en la región vecina al Etna, a lo largo de la madrugada. Si bien los sismos están disminuyendo, todavía se mantiene en valores altos, informó el INGV. 

El Etna, el volcán más activo de Europa, reanudó su actividad a finales de diciembre de 2020. Las erupciones explosivas con fuerte actividad sísmica se volvieron más frecuentes a partir del 16 de febrero del año corriente. 

(Sputnik)