A finales del mes de marzo, en el municipio José Antonio Páez del estado Apure se llevaron a cabo una serie de enfrentamientos entre grupos irregulares colombianos y efectivos de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (Fanb). Los mismos, de acuerdo al gobernador de la referida entidad, Ramón Carrizales, fueron provocados por grupos narcoterroristas, apoyados por el Ejecutivo de la vecina nación, que se encontraban de forma ilegal en nuestro territorio.

Este hecho, de acuerdo al gobierno de Venezuela, forma parte de la escalada de agresión y violencia impulsada por Colombia y los Estados Unidos contra el país. En los enfrentamientos, ocurridos específicamente en el sector La Coromoto de la parroquia Rafael Urdaneta, fallecieron dos oficiales de la Fanb y un irregular. También fueron capturados 32 sujetos, destruidos 6 campamentos y decomisado armamento, municiones, explosivos, pertrechos de guerra, vehículos y drogas.

Como era de esperarse, tras la activación del respectivo y necesario operativo militar en la zona, a través de las redes sociales y de los medios de comunicación privados inició una campaña mediática para tergiversar la verdadera naturaleza de los acontecimientos y acusar al Ejecutivo nacional de supuestas violaciones de los derechos humanos contra la población que hace vida en esta región apureña.

La periodista del canal internacional teleSUR, Madelein García, mediante una serie de videos publicados a través de la red social Twitter, se refirió a este punto. Destacó que los medios interactivos, una vez más, fueron utilizados como arma de guerra para sabotear la operación militar de la Fanb.

“Venezuela elevó ante la ONU la denuncia de la incursión de grupos armados colombianos en territorio venezolano, como parte de la escalada de agresión en contra del país. Con el inicio de la operación militar para sacar a estos grupos, la campaña mediática”, escribió la periodista en un primer tuit.

“Las redes sociales fueron usadas como arma de guerra para torpedear la operación militar Escudo Bolivariano, que tiene la misión de expulsar a los grupos irregulares colombianos de Apure. Se crearon grupos en WhatsApp, los fakenews corrían como pólvora”, acota en otro tuit.

Cada publicación es acompañada por un video. En uno de estos se observa a una habitante del pueblo de La Victoria, en Apure, asegurando que “nadie vio a ningún militar quemando casas”. García incluso señala que fueron identificadas dos personas de la zona que colaboraban con los irregulares colombianos, quienes grababan los falsos positivos.

En el primer video compartido por la periodista, se evidencia cómo ya comenzaron a abrir y a operar los comercios de las localidades adyacentes al lugar de los enfrentamientos. Muchas familias, que abandonaron la zona debido a la campaña de terror y de miedo infundida a través de las redes sociales, ya están retornando a sus hogares.

“Nosotros lo que queremos es que todo vuelva a la normalidad. Nos tocó salir corriendo y dejar nuestras casas abandonadas”, dice una de las vecinas. La propaganda de miedo habría sido impulsada mediante grupos de WhatsApp (entre estos los denominados Urdaneta Activa y Urdaneta Informa).

Curiosamente, muchas pertenencias de aquellos habitantes que decidieron irse (televisores y toda clase de electrodomésticos) aparecieron en casa de otros vecinos que también se habían ido del lugar. Todo fue devuelto a sus dueños. Se presume que este tipo de actos fueron realizados mientras las comunidades estaban solas, para inculpar a los efectivos de la Fanb de cometer supuestos saqueos.

La campaña de terror, infundida por WhatsApp, incluía el presunto bombardeo de la zona por parte de aviones pertenecientes a la Fuerza Aérea venezolana. Estos mensajes, en su mayoría notas de voz, provenían de Colombia. En este sentido, se viralizaron en las redes muchas imágenes y videos que no pertenecían a Venezuela, en donde se observaba el incendio y el saqueo de casas.

(LaIguana.TV)