Una de las razones que motivaron a los colombianos a salir a las calles a protestar en contra del Gobierno del presidente Iván Duque es el elevado gasto militar del país que se ha mantenido pese a la pandemia de la COVID-19.
En ese orden de ideas, el filósofo y comunicador Miguel Ángel Pérez Pirela aludió en su programa Desde Donde Sea a la operación mediática que se puso en marcha para justificar la renovación de la flota de aviones de guerra del país, usando como excusa la incursión de un avión de transporte ruso en el espacio aéreo de Colombia.
Así, relató, funcionarios de Colombia, incluyendo su cancillera, posicionaron una historia falsa con tintes propios de la Guerra Fría, según la cual la aeronave habría ingresado al país con el propósito de espiar e, incluso, «bombardear».
«Ese avión ruso tenía permiso para entrar, el problema fue que no entró por donde tenía permiso. Debía bordear La Guajira colombiana pasando por el Caribe venezolano occidental y de allí, continuar, y pasó directamente sobre el norte del territorio colombiano. Pasó por el Lago de Maracaibo y siguió derecho. (…). Además, [se trata de] un avión grande, no es un avión militar, no es un caza, no es Sukhoi, ni nada que se le parezca», sintetizó Pérez Pirela.
Por ello, explicó, la razón real de toda esta alharaca es que «los medios de comunicación privados colombianos, la oligarquía colombiana, el lobby militar colombiano e, incluso, el Gobierno colombiano» se valieron del incidente para justificar la compra de «más aviones, porque los aviones que tienen, de fabricación israelí, ya están llegando al final de su vida [útil]», gasto que resulta muy cuesta arriba defender en medio de una crisis como la que ha traído consigo la pandemia.
(LaIguana.TV)
