Este jueves 6 de mayo el secretario de Estado de los Estados Unidos, Anthony Blinken, durante una entrevista, señaló que Occidente debe ser muy cuidadoso con las inversiones que actualmente el gobierno de China está llevando a cabo en distintos países de la región. Según el funcionario, se debe analizar con muchísimo cuidado aquellos proyectos que involucran activos estratégicos.

“Creo que tenemos que ser muy cuidadosos sobre la naturaleza exacta de esa inversión. Si se trata de inversiones en industrias estratégicas, en activos estratégicos, los países tienen que analizar con mucho cuidado”, manifestó el secretario en entrevista concedida a la BBC.

“Otra cosa es decir: ‘no estamos haciendo ningún negocio’. Eso no es lo que estamos diciendo”, añadió.

Con respecto a si Occidente debería rechazar las inversiones chinas, Blinken indicó que su país no intenta frenar a China ni contenerla. Destacó que simplemente se trata de “mantener el orden internacional basado en reglas que se formaron tras la Segunda Guerra Mundial”.

La reacción de Blinken se genera luego de la conversación sostenida entre el presidente cubano Miguel Díaz-Canel y su homólogo chino Xi Jinping. En la referida reunión ambos líderes trataron temas referentes al 8° Congreso del Partido Comunista de Cuba y las celebraciones por el próximo centenario del Partido Comunista Chino.

“Conversamos cordialmente esta mañana con el secretario general del Pcch (Partido Comunista Chino) y presidente de la República Popular China, Xi Jinping, sobre resultados del 8° Congreso del Partido Comunista de Cuba y las celebraciones por el próximo centenario del Pcch. Destacamos entrañables lazos de amistad y cooperación”, escribió Díaz-Canel mediante su cuenta en la red social Twitter.

Previamente, mediante un comunicado, el Partido Comunista Chino ratificó el compromiso del gigante asiático de continuar trabajando con el gobierno de la isla caribeña “para seguir fomentando la amistad tradicional entre China y Cuba, fortalecer la confianza política, profundizar la comunicación estratégica y enriquecer constantemente la cooperación mutuamente beneficiosa y fructífera, a fin de alcanzar de conjunto nuevos logros en la construcción del socialismo en ambos países”.

La Habana y Pekín, por cierto, han firmado acuerdos vinculados temas como transporte, salud, biotecnología, fuentes renovables de energía, turismo, telecomunicaciones, informatización y formación de recursos humanos, entre otros.

Según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (Ocde), la renta per cápita de china fue superior a la de Europa desde el siglo X hasta el siglo XV. Siglos después, China se habría convertido en la mayor economía del mundo. De acuerdo a esta organización, en los últimos 40 años el crecimiento económico y militar del gigante asiático ha sido uno de los acontecimientos geopolíticos más importantes de la historia reciente.

Este es un tema que históricamente ha preocupado a las autoridades estadounidenses. Hoy día el país del norte ve a China como una grave amenaza para su propia estabilidad económica.

(LaIguana.TV)