La noche de caos que vivió ayer la ciudad colombiana de Tuluá redujo a escombros el Palacio de Justicia de esa ciudad, que ardió en llamas después de que fuera incendiado el edificio en una nueva jornada de protestas. 

El fuego arrasó con casi toda la estructura del Palacio de Justicia de esta ciudad, ubicada en el departamento del Valle del Cauca, 94 kilómetros al norte de Cali, epicentro de las manifestaciones que comenzaron el pasado 28 de abril contra el Gobierno de Iván Duque. 

Según dijo el alcalde, John Jairo Gómez, el daño causado al edificio es «irreparable».

Colombia vivirá este miércoles una nueva jornada de Paro Nacional para la cual han sido convocadas numerosas manifestaciones en las principales ciudades del país. 

(EFE)