En Marte, los días nublados son bastante raros. Las nubes suelen aparecer cerca del ecuador del planeta rojo en la época más fría del año. Sin embargo, por primera vez la NASA logró capturar imágenes de las nubes marcianas ‘tempranas’. 

Hace un año marciano —lo que equivale a dos años terrestres— los astrofísicos estadounidenses se dieron cuenta de que varias nubes habían comenzado a formarse sobre el róver antes de lo previsto. Este año, los científicos estaban preparados y tomaron una serie de imágenes del fenómeno. En las impactantes fotos en color, captadas con la cámara Mastcam, se pueden ver nubes brillantes y relucientes llenas de cristales de hielo que reflejan la luz del Sol. 

Pero, ¿por qué tienen tantos colores? Según explica el científico Mark Lemmon, del Instituto de Ciencias Espaciales en Boulder (Colorado), esto se debe al hecho de que «sus partículas son casi idénticas en tamaño, algo que suele ocurrir cuando las nubes se habían formado y habían crecido al mismo ritmo». 

Lemmon agrega que las nubes de nácar son una de las cosas más coloridas que hay en el planeta rojo.  

«Siempre me fascinan los colores que aparecen: rojos y verdes, azules y púrpuros. Es genial ver algo que brilla con tantos colores en Marte», subraya. 

El equipo del Curiosity también descubrió que las nubes tempranas se forman a mayores altitudes que el resto de las nubes marcianas que se suelen encontrar a unos 60 kilómetros de altura. Esto, a su vez, influye en su composición química: dado que las temperaturas son más bajas a mayores altitudes, las nubes tempranas están compuestas principalmente por dióxido de carbono congelado, o hielo seco. No obstante, todavía se necesitan más estudios para determinar qué imágenes de las captadas por Curiosity muestran las nubes de hielo seco y cuáles las de hielo de agua. Así que los astrofísicos tienen previsto ahora calcular la altitud de las nubes en las instantáneas. 

(Sputnik)