El Consejo de la Federación (Cámara Alta del Parlamento ruso) aprobó la salida de Rusia del Tratado de Cielos Abiertos (TCA). 

El proyecto de ley correspondiente, que el pasado 19 de mayo fue aprobado por la Cámara Baja, recibió un apoyo unánime de los senadores rusos. 

A su vez, el viceministro de Exteriores ruso Serguéi Riabkov, afirmó que Estados Unidos dejó claro que no va a volver al Tratado de Cielos Abiertos. 

«Los norteamericanos no dejaron lugar a dudas sobre su decisión definitiva de no volver al TCA», dijo Riabkov en una entrevista con el portal de noticias Lenta.ru. 

El diplomático señaló que EEUU politizó el tema de la retirada del TCA y su postura se basa en «acusaciones absurdas sobre la implicación de Rusia en el conflicto en Donbás y el incumplimiento de los Acuerdos de Minsk». 

«Las acusaciones no cesan a pesar de que Rusia no es parte de los Acuerdos de Minsk… Lo que está ocurriendo en Donbás es una de las justificaciones de EEUU para no retornar al TCA», opinó Riabkov. 

El vicecanciller recordó que el 22 de mayo de 2020 la Administración Trump anunció —a través del secretario de Estado Mike Pompeo— la decisión de abandonar el TCA y lanzó el período de seis meses que precede a la retirada de facto de ese tratado. 

«Pues todo ese tiempo, desde el 22 de mayo hasta fines del 2020, estuvimos buscando una solución que permitiera a Rusia permanecer en el TCA tras la retirada de EEUU… En aquel entonces pedimos a los aliados de EEUU firmantes del TCA solo dos cosas: no compartir en adelante con EEUU la información obtenida durante los vuelos de observación sobre Rusia y permitirnos realizar estos vuelos sobre las instalaciones de EEUU ubicadas en el territorio de sus aliados», relató Riabkov. 

Según explicó, Rusia no puede permanecer en el tratado sabiendo que los aliados de EEUU, movidos por la solidaridad atlántica y los compromisos con la OTAN, están compartiendo con EEUU —ya retirado del TCA— la información recogida durante los vuelos de observación sobre el territorio ruso. 

«Es que no podemos actuar de forma unilateral mientras estén menospreciando hasta tal punto nuestros intereses», subrayó el vicecanciller ruso. 

Riabkov también comunicó que el pasado 24 de mayo, cinco días después de que la Cámara Baja rusa aprobara la ley sobre la denuncia del TCA, Rusia entregó a EEUU un documento en el que explica qué es lo que está pasando con el tratado. 

«En el documento explicamos a los colegas norteamericanos que aún tienen la posibilidad de volver al TCA y entonces también Rusia suspendería los procedimientos internos de la salida del tratado», refirió el vicecanciller. 

Pero EEUU, dijo Riabkov, declaró que no volvería al TCA y lo justificó «con argumentos falsos que nada tenían que ver con el asunto». 

«EEUU lo politizó todo al máximo, movido por ideas y preferencias ajenas a la situación y mostrando que no le preocupa el destino del TCA ni el de la seguridad europea», concluyó el viceministro de Exteriores ruso. 

Vigente desde 2002, el Tratado de Cielos Abiertos que todavía reúne a 31 países europeos más Turquía y Canadá, permite a los observadores militares realizar vuelos de vigilancia aérea para obtener imágenes de movimientos de tropas y buques en un vasto territorio desde la ciudad canadiense de Vancouver hasta el puerto de Vladivostok, en el Lejano Oriente ruso. 

Rusia comenzó a desvincularse del acuerdo luego de que EEUU decidiera abandonarlo en 2020. 

Conforme al procedimiento establecido, el país auroasiático abandonaría definitivamente el tratado en diciembre de este año. 

(Sputnik)