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Este domingo, los colombianos acudieron a las urnas para elegir al nuevo Presidente de Colombia, en la contienda resultó ganador Iván Duque (Centro Democrático), el abanderado del expresidente Álvaro Uribe Vélez.

 

A pesar de su rechazo a las medidas implementadas en los últimos años por el actual mandatario, Juan Manuel Santos, ambos guardan una conexión: tanto Santos como Duque llegaron a la Presidencia de Colombia respaldados por Álvaro Uribe Vélez, sobre quien pesan acusaciones de lazos con el paramilitarismo y el narcotráfico en la nación neogranadina.

 

En 2010, Santos fue presentado como el candidato del uribismo para las elecciones presidenciales de ese año, resultando ganador para el período 2010-2014. Durante el gobierno de Uribe, el saliente mandatario ejerció el cargo de ministro de la Defensa.

 

Historia similar es la de Duque, quien entre los años 2010-2011, fue asesor internacional del expresidente Uribe. Tres años después, llegaría al Senado de la mano de su protector.

 

El senador fue ungido el año pasado como el candidato presidencial del Centro Democrático, el partido que fundó Uribe.

 

Además de su gran acercamiento con Uribe, Duque tuvo un gran lazo con el actual mandatario colombiano. De acuerdo con una nota del diario El Tiempo, Duque fue asesor de Santos, mientras este encabeza la cartera del Ministerio de Hacienda entre 2000-2002.

 

Duque ha sido un fuerte crítico de la decisión del gobierno de Santos de firmar los Acuerdos de Paz con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc-EP), para garantizar la paz en la nación neogranadina tras más de 50 años de conflicto armado…

 

El recién elegido presidente ha reiterado en varias ocasiones que si llega al poder realizará «unos ajustes» a los acuerdos firmados en la mayor de las Antillas en 2016.

 

«Yo siempre he dicho que no se trata de destruir o hacer trizas los acuerdos, pero sí se trata de hacerles modificaciones importantes a aquellas cosas que afectan el Estado de derecho», expresó en una entrevista que concedió en enero de este año al diario El País de España.

 

Duque también deberá decidir si continúa o no con los diálogos que mantiene el actual Gobierno colombiano con el Ejército de Liberación Nacional (ELN), conversaciones que se celebran desde el pasado 10 de mayo, en La Habana, Cuba.

 

Durante la campaña, su discurso giró en torno a la recuperación económica, la lucha frontal contra la corrupción y la delincuencia así como propuso lograr una sustancial mejora de los sistemas de la salud y educación.

 

(AVN)