El Papa ha ingresado esta tarde en un hospital de Roma para ser sometido a una «cirugía programada en el colon», ha comunicado un portavoz de El Vaticano, Matteo Bruni, en un escueto comunicado.

Bruni ha precisado que Francisco, de 84 años, sufre de «una estenosis diverticular sintomática del colon» y que está en el hospital Policlínico Gemelli de Roma. La operación será llevada a cabo por el doctor Sergio Alfieri y a su término se emitirá un boletín médico. La estenosis diverticular causa recurrente dolor abdominal e hinchazón.

Se trata de la primera vez en la que el Papa ingresa en un hospital desde que fue elegido como Pontífice en 2013. Esta misma mañana apareció con aspecto saludable en la Plaza de San Pedro para dar la bendición y su mensaje dominical.

Además, se anunció que Francisco va a viajar a Eslovaquia del 12 al 15 de septiembre próximo, tras concelebrar la mesa final del Congreso Eucarístico Internacional que tendrá lugar en Budapest.

«Me siento orgulloso de anunciar que del 12 al 15 de septiembre próximo, si Dios quiere, me desplazaré en Eslovaquia para hacer una visita pastoral», dijo al término del rezo dominical del Ángelus ante las decenas de personas reunidas en la plaza de San Pedro del Vaticano para escucharle.

Francisco explicó que antes del inicio de la visita concelebrará en Budapest la mesa final del Congreso Eucarístico Internacional y quiso dar las gracias a todos los que están preparando el viaje.

El portavoz vaticano, Matteo Bruni, precisó en un comunicado que «por invitación de las Autoridades civiles y de las Conferencias episcopales, el domingo 12 de septiembre de 2021, el Papa viajará a Budapest con ocasión de la Santa Misa conclusiva del 52º Congreso Eucarístico Internacional«.

«Sucesivamente, del 12 al 15 de septiembre de 2021, viajará a Eslovaquia, visitando las ciudades de BratislavaPreovKoice y Šatin. El programa del viaje será publicado a su tiempo», añadió.

El anuncio del viaje realizado por el papa fue acogido con vítores entre los presentes en la plaza de San Pedro, ante lo que el papa exclamó: «están contentos los eslovacos», además de enviar un saludo a todos los fieles.

Durante el Ángelus, Francisco se refirió a la necesidad de superar la «comodidad de la costumbre» y «la dictadura de los prejuicios», que son «un riesgo que todos corremos: pensamos que sabemos mucho de una persona, la etiquetamos y la encerramos en nuestros prejuicios».

(elmundo.es)