Mientras el presidente de Haití, Jovenel Moïse, era brutalmente asesinado por asaltantes la madrugada de este miércoles 7 de julio en la residencia oficial, sus dos hijos, que estaban en la mismo casa, afortunadamente resultaron ilesos porque lograron esconderse en otra habitación.  

“La hija de la pareja estaba en la misma estancia que sus padres en el momento del ataque, pero consiguió esconderse en la habitación de su hermano, que también resultó ileso”, citó la agencia de noticias EFE.  

El juez de Paz encargado del informe forense, Carl Henry Destin, quien reveló detalles del atentado al diario “Le Nouvelliste”, señaló que el mandatario nacional recibió doce impactos de bala por armas de gran calibre y también de 9 milímetros.  

“Los dos hijos de Moïse se encontraban en lugares seguros, sin embargo, se desconoce su estado de salud”, señaló el informe preliminar, pero luego en el curso de la investigación las autoridades determinaron que los chicos no resultaron heridos.  

El Juez de Paz destacó que el escritorio y la habitación de Moïse fueron “saqueados” por los asaltantes. “Lo encontramos acostado boca arriba, pantalón azul, camisa blanca manchada de sangre, boca abierta, ojo izquierdo perforado. Vimos un agujero de bala en la frente, uno en cada pezón, tres en la cadera, uno en el abdomen”, relató.  

(LaIguana.TV)