Tras el violento ataque xenófobo y racista que sufrieran inmigrantes, en su mayoría venezolanos, en Iquique, al noreste de Chile el pasado sábado 25 de septiembre, militantes de las Juventudes Comunistas de esa comuna se apersonaron al sitio «a entregar un momento de abrigo y acojo para las familias afectadas», según reportaron a través de su cuenta en Twitter. 

En imágenes compartidas a través de la red social, se aprecia a los jóvenes mientras entregan insumos a personas –incluyendo niños– que están a la intemperie y sin ninguna posibilidad de resguardo, luego de que una turba que participaba en una manifestación antiinmigrantes atacara un campamento improvisado y les quemara sus pertenencias. 

«¡Ningún ser humano es ilegal: no a la xenofobia y racismo!«, se lee en su trino. 

El ataque ha sido calificado por la Organización de las Naciones Unidas como una «inadmisible humillación». Felipe González, relator especial sobre los derechos de los migrantes en la ONU advirtió, asimismo, que «el discurso xenófobo, asimilando migración a delincuencia, que por desgracia se ha ido volviendo cada vez más frecuente en Chile, alimenta esta clase de barbarismo».

Internamente, políticos como la candidata izquierdista al Congreso Florencia Lagos Neumann estiman que esta situación es la resulta de las ofertas engañosas del presidente Sebastián Piñera, que usó la crisis venezolana para obtener réditos políticos.

«Piñera fue a Cúcuta y ofreció a venezolanos y venezolanas un ‘paraíso’, su supuesta ‘salvación’. Pertenencias de familias y niños quemadas, desalojados de Plaza Brasil de Iquique y advertidos de ser expulsados del país. Este crimen es responsabilidad de Piñera y el Estado de Chile», apuntó Lagos en Twitter. 

Por su lado, Venezuela repudió la agresión xenófoba y demandó a las autoridades chilenas «respeto a la integridad física y sicológica» de sus connacionales. 

Además, el Gobierno Bolivariano anunció la activación de vuelos del Plan Vuelta a la Patria destinados a Chile, con el propósito de garantizar el retorno de ciudadanos venezolanos que hayan sido víctimas de xenofobia en el país austral. 

(LaIguana.TV)