La vacuna rusa contra el coronavirus Sputnik Light —versión monodosis de Sputnik V— se puede utilizar como vacuna de refuerzo para cualquier otro fármaco anticovid extranjero, declaró el director del Centro de Epidemiología y Microbiología Nikolái Gamaleya, Alexandr Guintsburg.
«Desde nuestro punto de vista Sputnik Light es un fármaco muy prometedor que se puede utilizar (como vacuna de refuerzo) para casi cualquier vacuna que ahora se utiliza ampliamente en el mundo», dijo Guintsburg ante la prensa.
Señaló que la utilización de la vacuna monodosis rusa como inyección de refuerzo permitirá prolongar la inmunidad contra COVID-19 por un período de seis meses.
Guintsburg agregó que la variante delta del coronavirus requiere aplicar una vacuna de refuerzo cada seis meses e indicó que Sputnik Light cuenta con todos requisitos necesarios para convertirse en ese fármaco.
Desarrollada por el Centro de Epidemiología y Microbiología Nikolái Gamaleya en cooperación con el Fondo Ruso de Inversión Directa, la Sputnik Light es una versión monodosis de la vacuna Sputnik V basada en el adenovirus humano, que requiere la administración de dos dosis con un intervalo de 21 días para la inmunización completa.
Sputnik Light muestra una alta eficiencia en la inmunización de la población en varios países.
En particular, los datos recogidos en la provincia argentina de Buenos Aires indican que la Sputnik Light tiene una eficacia de entre el 78,6% y el 83,7% en la vacunación de las personas mayores.
A su vez, el Ministerio de Salud de Paraguay afirma que la eficacia del fármaco anticovid ruso alcanzó el 93,5% tras ser inoculadas más de 320.000 personas.
Los estudios de combinación de Sputnik V con otras vacunas contra el COVID-19 ya se realizan en Azerbaiyán, Emiratos Árabes Unidos, Argentina y otros países.
(Sputnik)