Aunque Estados Unidos impone sin descanso medidas coercitivas unilaterales e ilegales contra países como Irán, Venezuela, Rusia o China en un intento por derrocar a sus gobiernos o forzar una alineación con sus intereses, la respuesta general a estas agresiones han sido los convenios bilaterales de cooperación, que más que hacer frente a Washington, pretenden defender su derecho a comerciar sin tutelas ni restricciones. 
 
En el caso de Venezuela e Irán, sus dos décadas cooperación estrecha han alcanzado nuevas cotas tras la entrada en funcionamiento de acuerdos para la comercialización e intercambio de petróleo, base de las dos economías, así como un amplio acuerdo en diversas áreas estratégicas –incluyendo crudo y comercio de mercancías– para desarrollar en 20 años. 
 
Tal fue el tema en torno al cual disertó el filósofo político y comunicador Miguel Ángel Pérez Pirela en la edición 377 de su programa Desde Donde Sea, transmitida este miércoles 20 de octubre a través de las plataformas en línea de LaIguana.TV. 
 
Antes de entrar en materia, analizó sucintamente el acuerdo de reconocimiento entre los parlamentos de Colombia y Venezuela, con el que se pretende normalizar las 
 
«Esta es una cachetada monumental a todas las trabas que ha impuesto el gobierno de Iván Duque contra el gobierno venezolano», aseguró. A su parecer, Duque, guiado por su mentor, el expresidente Álvaro Uribe Vélez y bajo tutela de Estados Unidos,  ha tomado decisiones contra su vecino país que se han vuelto en su contra, particularmente en el tema comercial, puesto que su economía es altamente dependiente del comercio bilateral. 
 
A contrapelo de esta realidad, indicó, Duque y Uribe se han enfrascado en ganar lo que consideran una batalla personal: el derrocamiento del presidente Nicolás Maduro. 
 
Los detalles de esta información, apuntó, pueden leerse en el trabajo periodístico Lo último: parlamentos de Venezuela y Colombia restablecerán relaciones diplomáticas y comerciales, publicado en el portal de LaIguana.TV. 
 
En el texto, precisó, se relata que las declaraciones de Rodríguez surgen como respuesta a  la Proposición N° 34 del año 2021 aprobada por unanimidad este martes 19 de octubre por el Senado colombiano, en la que se establece crear una comisión bilateral entre ambos parlamentos con el propósito de trabajar de manera conjunta la normalización de las relaciones diplomáticas y comerciales, la protección de las empresas colombianas en suelo venezolano y viceversa, así como la verificación de las buenas prácticas comerciales entre ambos países.
 
Al otro lado de la frontera, señaló el experto, en declaraciones a la prensa, el presidente del Senado de Colombia, Juan Diego Gómez, se refirió al comunicado enviado a Jorge Rodríguez como un mensaje inequívoco para Iván Duque y Martha Lucía Ramírez.
 
Para Pérez Pirela, «esto hace tambalear todo el proceso de desestabilización que se estaba dando desde Colombia en contra de Venezuela», pues más allá de la insistencia de Duque, ello es signo del malestar interno en la nación hermana, cuya economía se ha contraído fuertemente desde que el gobernante decidiera cortar todo lazo con Venezuela. 
 
Comentó, asimismo, que el presidente de la República, Nicolás Maduro, respondió a la propuesta del Senado de Colombia para restablecer las relaciones diplomáticas. En este sentido, dijo que es un paso necesario para países vecinos, y abrazó la idea de despolitizar las relaciones comerciales, tal y como propuso el Senado de Colombia.
 
«Hay muchas aristas. Incluso la revista Semana dedicó un titular a su archiadversario», Gustavo Petro, en el que se reconoce que lidera por mucho las encuestas en la carrera a la presidencia, pues ha «aplastado» a todas las candidaturas del uribismo, apuntó. 
 
En su criterio, esta decisión del Parlamento, debe interpretarse en el contexto de una creciente descomposición y pérdida de popularidad del actual gobierno y muy particularmente, sobre la figura de Uribe, a quien se le conoce con el nada gentil mote de «El Matarife». 
 
Contra las sanciones, Venezuela e Irán implementan acuerdos eficaces
 
Para entrar en materia, el analista hizo referencia al más reciente acuerdo petrolero entre Caracas y Teherán, que ya empieza a dar sus primeros frutos, pues el pasado 16 de octubre, el petrolero iraní Dino I zarpó del puerto de Jose, en el oriente de Venezuela, con dos millones de barriles de crudo pesado procedentes de la estatal Pdvsa, informó la agencia Reuters. 
 
En este punto, el comunicador se pregunto si ya al corriente del zarpe de esta embarcación, Estados Unidos no habría emprendido una persecución en alta mar, tal como ya lo hiciera en otras ocasiones, en las que incluso se apropió indebidamente de combustible ya cancelado por el Estado venezolano y lo remató al mejor postor en el puerto de Houston.  
 
El convenio, suscrito entre dos naciones sancionadas por Estados Unidos a mediados de septiembre y que se extenderá al menos durante seis meses, garantiza un suministro estable de insumos requeridos para la conversión de petróleo extrapesado en crudo más ligero. Además, se prevé que Irán reciba petróleo pesado para mezclar, refinar o vender a clientes de Asia, explicó. 
 
Pérez Pirela refirió que Teherán cuenta con amplia experiencia en la evasión de medidas coercitivas unilaterales. En 2019, cuando el departamento del Tesoro de Estados Unidos impuso nuevas sanciones a la estatal National Iranian Oil Company (NIOC), el país anunció un esquema de intercambio de crudo basado en trueques, transas en monedas locales y cotizaciones en la bolsa. 
 
Si todo marcha como está previsto, comentó, Venezuela podría estabilizar las exportaciones de petróleo extrapesado de la Faja del Orinoco y además, refinar petróleo ligero, indispensable para la producción de combustible. 
 
Sin embargo, advirtió, en septiembre, el Tesoro estadounidense dijo a Reuters que «el comercio bilateral de petróleo podría ser una violación de las sanciones de Estados Unidos a ambos países», declaraciones que le merecieron rechazo, pues pareciera que desde el punto de vista de Washington, los países sancionados deben permanecer inmóviles y morirse de hambre. 
 
En todo caso, agregó, pese a la amenaza, a fines de ese mismo mes Pdvsa consiguió enviar a la nación persa en el supertanquero Felicity, de bandera iraní, 1,9 millones de barriles de crudo extrapesado Merey. 
 
Además, a su juicio tampoco puede dejarse de lado que en reciente visita a la capital iraní, el canciller venezolano, Félix Plascencia, anunció la entrada en vigor de un convenio de cooperación a gran escala entre las dos naciones, que se extenderá por dos décadas y cuya primera ronda de reuniones tendrá lugar antes del fin del año en Teheran.
 
Para ahondar en el análisis, recuperó las reflexiones de la analista política María Fernanda Barreto, quien considera que este último acuerdo es el resultado de dos décadas de relaciones entre Venezuela e Irán redefinidas en términos de «hermandad» con el arribo del presidente Hugo Chávez al poder en 1999. 
 
La experta apuntó que este nuevo pacto entre las dos naciones, al suscribirse a 20 años, trascenderá las coyunturas y, eventualmente elevará al nivel más estratégico la cooperación bilateral, sintetizó Pérez Pirela. 
 
Además, refirió, para Barreto, la alianza entre países asediados, víctimas de las medidas coercitivas unilaterales, es la clara demostración de que la actuación en bloque unitario es la única forma de poner freno al unilateralismo estadounidense y avanzar en la construcción del mundo pluricéntrico y multipolar.  
 
Buenas noticias para Venezuela: precios del petróleo al alza
 
Desde el punto de vista de Miguel Ángel Pérez Pirela, esta clase de decisiones impactan directamente sobre el precio del crudo y tanto es así que el petróleo va por los 81 dólares por barril. 
 
Al menos a eso se cotiza el petróleo de Texas (WTI), que cerró la semana pasada con un alza del 0,64 % y se situaba en 81,83 dólares, mientras que en la bolsa mercantil de Nueva York (Nymex), los contratos futuros del WTI para entrega en noviembre sumaban 0,52 dólares con respecto al cierre anterior, apuntó el filósofo.
 
A este respecto, trajo a colación las declaraciones del analista Jeffrey Haley, de la firma Oanda, en las que se precisa que «la debilidad del dólar estadounidense impulsó los precios de la energía, ayudada por los comentarios de Arabia Saudí que sugerían que la Opep+ no se inclinará por subir la producción debido a los precios del gas natural».
 
Para el jefe del Instituto de Estudios Internacionales de Energía de Irán, Mohamad Sadegh, la administración de Trump mantuvo los precios del petróleo por debajo de 60 dólares por barril porque, según su visión de imperio económico, eso, aunado a las sanciones sobre grandes productores como Irán o Venezuela, favorecería a los productores internos, relató el también director de LaIguana.TV. 
 
La tríada China-Irán y Venezuela: alianzas antisanciones
 
En el parecer de Pérez Pirela, por su peso específico en el concierto internacional, China es otro país que ha sido fundamental para sortear las imposiciones de la Casa Blanca. 
 
No en balde, indicó, la portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, Hua Cungying, afirmó que China sostiene y sostendrá con países sancionados como Venezuela e Irán y, además, mantendrá la relaciones comerciales legales que los países consideren de acuerdo a su soberanía. 
 
De otro lado, aseguró que no puede obviarse que Estados Unidos sabe cómo usar ardides para dificultar las transacciones entre socios que no son afines a sus demandas de control mundial. 
 
Sin embargo, apuntó que expertos aseguran que Washington se abstiene de interceptar buques petroleros adquiridos por clientes chinos, lo que demuestra que, en la práctica, además de su ineficacia, las sanciones contra Venezuela, Irán e incluso China han producido un eje alineado no necesariamente contra Estados Unidos, sino más bien a favor de los pueblos y del comercio de cada nación. 
 
Por ello, dijo para redondear este tema, quienes han sido sancionados tienen en común la necesidad de sortear estas medidas que asfixian a los pueblos y que descaradamente Estados Unidos recrudece a medida que estos no se doblegan o entregan sus recursos. 
 
Otras áreas de cooperación entre Irán y Venezuela: gasolina y comercio
 
Aunque la cooperación entre Caracas y Teherán es estrecha, se ha incrementado a raíz del arreciamiento de las medidas coercitivas unilaterales sobre Pdvsa y las compañías iraníes por parte de la administración Trump en 2019, recordó el comunicador.
 
Por ello, mencionó que si bien en apariencia la Casa Blanca no impuso sanciones a las dos naciones por los mismos motivos, sí se planteó el mismo objetivo estratégico: usar el crudo como arma política para favorecer a sus intereses locales, aunque no puede decirse que haya sido enteramente exitosa, pues en el caso de Irán, a pesar de las presiones, naciones europeas como Reino Unido o Alemania se aprestaron a diseñar esquemas de comercio orientados a burlar las sanciones.
 
En todo caso, en 2020, aún con la pandemia de COVID-19, Washington no escatimó en esfuerzos para doblegar a Caracas y conseguir el ansiado «cambio de régimen». Con una producción petrolera en picada y una industria imposibilitada de maniobrar por causa del asedio estadounidense, la escasez de combustible se hizo moneda corriente en Venezuela, sintetizó el analista. 
 
En el mismo orden, recordó que en abril de ese año, el gobierno del presidente Nicolás Maduro denunció que el bloqueo naval le impedía la adquisición de combustible y químicos necesarios para la refinación de gasolina en el mercado internacional. 
 
Además, cuando Irán trató de auxiliar a Venezuela, tribunales estadounidenses dictaron órdenes de confiscación contra buques iraníes que se dirigían a Venezuela con gasolina y aquilatos necesarios para su refinación. 
 
Pese al oscuro panorama descrito previamente, Pérez Pirela enfatizó que los cálculos de los funcionarios trumpistas fallaron pues varios tanqueros iraníes evadieron la persecución y el acoso de buques estadounidenses en alta mar y lograron arribar a puertos venezolanos cargados de combustible e insumos necesarios para la reactivación de importantes refinerías en el país. 
 
Tras concretarse la operación, el presidente venezolano, Nicolás Maduro, agradeció la solidaridad iraní, mencionó un «plan» interno de resistencia frente a las sanciones, defendió el derecho de Venezuela a comerciar libremente y acusó al gobierno de Estados Unidos de perpetrar crímenes de lesa humanidad contra la nación suramericana. 
 
El analista recordó que esta acción obedece a la reciprocidad iraní, en tanto durante el gobierno del entonces presidente Hugo Chávez, Caracas envió gasolina a Teherán, en medio de una crisis similar a la que hoy padece Venezuela. 
 
Pasando a otro tema, puntualizó que la ruta Caracas-Teherán también se ha alimentado en fechas recientes del comercio de comestibles. Una prueba de ello es que en julio de 2020, como parte de una alianza entre empresarios venezolanos e iraníes, se inauguró en Caracas el hipermercado Megasis donde se ofrecen tanto mercancías criollas como de la nación persa. 
 
Entonces, refirió, Hojjatolla Soltani, embajador de Irán en Venezuela, destacó que la apertura de este gran centro de expendio de alimentos, el primero con capital iraní en América Latina, «demuestra que las sanciones unilaterales del imperio no funcionan, que ahora la comunidad internacional en general, y muchos países revolucionarios en especial, no respetan esas sanciones unilaterales».
 
Pérez Pirela subrayó que no se trata de una iniciativa aislada, sino de los resultados concretos de esfuerzos de cooperación sostenidos. 
 
Para concluir sus reflexiones, comentó que tras una reunión bilateral con su par venezolano, el canciller iraní, Mohamad Yavad Zarif, aludió a la creciente disponibilidad de productos iraníes en Venezuela, lo que en su criterio implica una «oportunidad» para ampliar los lazos comerciales. Asimismo, mencionó que se abriría el compás para que empresarios venezolanos tuvieran ocasión de hacer negocios en Irán junto a sus pares locales.
 
Comentario al cierre: el Senado da la espalda a Duque por relaciones con Venezuela
 
Al cierre, Pérez Pirela aludió la respuesta de Iván Duque a la propuesta de alianza entre los Legislativos de Venezuela y Colombia, cuyos detalles pueden encontrarse en la nota «Agraviado: Duque replicó a la decisión unánime del Senado colombiano sobre Venezuela (+Video)», publicado en LaIguana.TV
 
Este miércoles 20 de octubre, el presidente de Colombia, Iván Duque, declaró que no reconocerá al Gobierno Bolivariano de Venezuela ante la propuesta del Senado de trabajar con la Asamblea Nacional (AN) para restituir las relaciones entre ambos países, citó. 
 
«No importa, Duque, que tú no lo reconozcas, todo el parlamento lo hace y ya prepara al nuevo presidente», añadió.
 
Así lo expresó durante una declaración conjunta con el Secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, donde indicó que «una cosa en la que no nos podemos equivocar es que lo que Colombia no va a hacer es reconocer a una dictadura oprobiosa, corrupta, narcotraficante».
 
En ese sentido, Duque enfatizó que su Gobierno, así como el de Estados Unidos y de «otros cincuenta países» ya han reconocido y apoyado al tinglado legislativo que el exdiputado ultraderechista Juan Guaidó montó a través de las redes sociales.
 
Sobre esto, el analista corrigió al mandatario, puesto que si bien inicialmente era cierto lo de los 50 países, ya no es así y está prácticamente solo en su defensa al pseudo gobierno de usurpación de Guaidó. 
 
También indicó que Duque sostuvo su retórica de «ayudar» a los venezolanos migrantes. «En eso nosotros hemos dicho que, con todo el rigor, facilitaremos, como lo hemos venido haciendo, que el pueblo venezolano tenga acceso ante las carencias de Venezuela», dijo, mas el analista replicó que en Venezuela residen unos seis millones de colombianos, de los que el Estado se ocupa sin ninguna discriminación. 
(LaIguana.TV)