Varias veces se ha hablado sobre los efectos que podría tener una tormenta magnética en la Tierra, sin embargo, no siempre generan un gran impacto, pero tal parece que la posibilidad de que se registre una nueva está cerca de ser una realidad.
Resulta que el pasado jueves 28 de octubre del 2021, se registró una fuerte llamarada, es decir, una erupción sobre la superficie del Sol.
No obstante, el destello fue catalogado de “clase máxima” en la escala que mide la actividad de nuestra máxima estrella del Sistema Solar.
Dichos datos fueron registrados por el Centro de Meteorología Espacial de Estados Unidos y el Laboratorio de Astronomía Solar del Instituto de Física de la Academia de las Ciencias de Rusia.
De acuerdo con los expertos, la erupción se produjo en el lado que apunta hacia nuestro planeta, tuvo una magnitud de X1 y su duración fue de 30 minutos aproximadamente.
¿Cuál sería el impacto de la tormenta magnética en la Tierra?
Según los reportes, la llamarada fue demasiado poderosa al grado que podría provocar un fuerte apagón de radio en la parte soleada de nuestro planeta azul, con foco en América del Sur.
Además, el fenómeno estuvo acompañado de una eyección de masa coronal, que es una onda hecha de radiación y viento solar que se desprende de la estrella ardiente.
Dicha acción suele ocurrir durante la Actividad Máxima Solar.
Debido a la distancia, las ondas de partículas cargadas pueden tardar días en llegar al planeta, y se pronostica que, específicamente, el sábado.
En ese sentido, y en interacción con el campo magnético de la Tierra, pueden provocar interferencias en sistemas eléctricos y de radio, así como sobrecargar las auroras boreales, informa RT.
Clasificación de erupciones solares
Las llamaradas registradas en el astro se clasifican por la intensidad de rayos X como A, B, C, M o X.
Es así que, la primera clasificación es para las ondas más débiles, mientras que X para las más fuertes y poderosas.
Estás últimas pueden ser de diferente potencia, la cual se distingue por números, siendo el 1 lo más leve.
La tormenta magnética en la Tierra se da en el marco de que el Sol está a principios de un nuevo ciclo de actividad, que cambia cada 11 años y cuyo inicio fue en diciembre del 2019.
(MVS)
