En un artículo publicado el lunes, The National Interest sostuvo que, al parecer, la República Islámica de Irán ha logrado enredar a la principal superpotencia del mundo con fuerzas navales ligeras y con un bajo costo en las aguas del Golfo Pérsico y el estrecho de Ormuz.

Ya sea por cálculo estratégico o cualquier otra razón, las autoridades iraníes parecen estar decididos a no permitir que el “gran satán”, es decir EEUU, penetre en “su patio trasero”, añade.

“No cabe duda de que Teherán puede imponer grandes costos de oportunidad a Washington. Ya lo está haciendo”, reza el informe refiriéndose a recientes acontecimientos en la región del Golfo Pérsico.

Por lo tanto, The National Interest concluye que el Gobierno estadounidense y su Armada no deben subestimar el poderío del país persa en lo que se refiere a defender su soberanía.

Las aguas sureñas de Irán han sido escenario de tensiones sin precedentes entre Teherán y Washington en los últimos tres años, en particular, después de que EEUU abandonara unilateralmente el acuerdo nuclear de 2015 y reimpusiera embargos al país persa.

En el caso más reciente, a principios de este mes en curso, Teherán publicó las imágenes que mostraban cómo las fuerzas navales del Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI) de Irán frustraron el pasado 24 de octubre un intento de piratería estadounidense en el golfo de Omán al lograr recuperar un petrolero cargado con crudo iraní después de que los militares norteamericanos secuestraran el buque y transfirieran el cargamento a otro navío en estas aguas.

Las Fuerzas Armadas iraníes siguen reiterando constantemente que no buscan una guerra con ningún país, pero advierten que responderán a la más mínima intención de socavar la seguridad del país persa, especialmente en el Golfo Pérsico, que es considerado una de las líneas rojas de la República Islámica.

(HispanTV)