El presidente de Chile, Sebastián Piñera, promulgó la ley de matrimonio igualitario aprobada esta semana en el Congreso Nacional, la cual permite la unión de personas del mismo sexo. 

«Hoy promulgamos la ley que permite el matrimonio igualitario porque llegó el tiempo de consagrar la libertad de amar y formar familia, y darle todo el valor a la dignidad de todas las relaciones de amor y afecto entre dos personas», afirmó el mandatario en la ceremonia de promulgación de la ley en la sede de Gobierno, el Palacio de La Moneda.

El mandatario dijo que el objetivo de esta ley es proteger a la familia, otorgando no solo reconocimiento al matrimonio, sino también a los derechos de los padres y madres de uniones homoparentales en materias como el cuidado personal de los hijos, la pensión de alimentos y los derechos hereditarios.

«Esta ley busca poner en un pie de igualdad todas las relaciones de amor entre dos personas porque es un deber del Estado el proteger todos los tipos de familia, sin discriminar por orientación sexual o identidad de género de quienes las componen», agregó.

Aclaró que la ley solo contempla a los matrimonios civiles, asegurando que las iglesias seguirán teniendo la libertad de definir las condiciones de los matrimonios religiosos.

«Sabemos que en el país hay posiciones distintas sobre esta materia, de hecho en el pasado mi mirada fue distinta, pero así como es importante actuar con convicciones profundas también es importante el poder evolucionar y desarrollar nuevas perspectivas», confesó.

Principales cambios

El principal cambio de la nueva ley será modificar la definición de matrimonio en el Código Civil, cambiando las palabras «hombre y mujer» por «personas».

Además, todas las veces que se hable de «padre» o «madre» en las legislaciones en materia de filiación, cambiarán a la palabra «progenitores» y los conceptos de «marido» y «mujer» pasarán a ser «cónyuges».

Los cónyuges podrán determinar vínculos de filiación ya sea por técnicas de reproducción humana asistida como también por actos jurídicos de reconocimiento y además tendrán posibilidad de adoptar con la misma prioridad que actualmente tienen las parejas casadas.

Esta ley reconoce los matrimonios celebrados en el extranjero por personas del mismo o distinto sexo y también regula una serie de materias para evitar la discriminación de personas trans, haciendo compatible la ley de matrimonio igualitario con la ley de identidad de género promulgada en 2018.

Según los cálculos del Registro Civil en cuanto a implementación y cambios técnicos, se espera que en marzo del próximo año comiencen a celebrarse en Chile los primeros matrimonios de personas del mismo sexo.

(Sputnik)