“Democracia se ha convertido desde hace tiempo en un arma de destrucción masiva usada por Estados Unidos para interferir en los asuntos de otros países”, ha denunciado un portavoz del Ministerio chino de Asuntos Exteriores, en reacción a la celebración de la llamada Cumbre por la Democracia, organizada por la Casa Blanca y a la que Pekín no estuvo invitado.

En un comunicado emitido este sábado 11 de diciembre, la Cancillería china ha criticado que la cumbre fue organizada por Washington para “trazar líneas de prejuicio ideológico, instrumentalizar y convertir la democracia en un arma […] para incitar división y confrontación”.

“La democracia al estilo estadounidense está llena de malestares” y “un juego basado en el dinero para los ricos”, agrega la nota.

En la cita realizada participaron representantes de 100 gobiernos, junto con grupos de la sociedad civil y periodistas; sin embargo, no fue invitada China, pero sí Taiwán, que el gigante asiático considera parte de su territorio.

China resta competencia a EEUU para hablar de la democracia y derechos humanos, pues, alerta, la democracia en el país norteamericano se limita “a la política monetaria” ya que, en realidad, su Gobierno pertenece a “unas pocas élites”.

(HispanTV)