La administración de Joe Biden va a incluir en su lista negra a ocho empresas chinas, entre ellas el mayor fabricante de aviones no tripulados comerciales, DJI, informó el Financial Times citando fuentes. 

El Departamento del Tesoro de EEUU incorporará a DJI y a otras empresas en su lista negra de «compañías chinas del complejo militar-industrial», según dos personas informadas sobre la medida, comunicó Financial Times citando sus fuentes. 

La publicación añade que los inversores estadounidenses tienen prohibido adquirir participación financiera en los 60 grupos chinos que ya están en la lista negra. 

Las acciones tomadas por la administración de Biden responden a las presuntas violaciones de los derechos humanos contra la minoría musulmana uigur, en la región autónoma china de Sinkiang. 

La compañía DJI, al igual que las otras firmas, están acusadas de participar en la vigilancia de este grupo étnico y minoritario, como describe el periódico. 

Aparte de la compañía DJI, en la lista incluyen a Megvii, especializada en tecnología de inteligencia artificial y servicios de reconocimiento facial, y a Dawning Information Industry, fabricante de superordenadores. 

Otras empresas pasarán a ser parte de la lista negra, entre ellas CloudWalk Technology, Xiamen Meiya Pico, Yitu Technology, Leon Technology y NetPosa Technologies. 

Occidente ha impulsado sanciones en contra de China y funcionarios que violen los derechos humanos de la minoría étnica de la región autónoma de Sinkiang, llegando incluso a impulsar por parte de EEUU un boicot diplomático en contra de los Juegos Olímpicos de Invierno en China 2022. 

El 6 de diciembre, Estados Unidos confirmó que no enviará ninguna representación diplomática u oficial a los próximos Juegos Olímpicos de Invierno en China. El boicot diplomático, no obstante, no restringirá la participación de los atletas estadounidenses en las actividades deportivas. 

La embajada de China en Washington dijo a Sputnik que su Gobierno no había invitado a los altos cargos estadounidenses y confiaba en que la decisión de la Casa Blanca no afecte la realización exitosa de los Juegos Olímpicos de Invierno. 

(Sputnik)