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Cuando se es artista, en el sentido completo de la palabra, no solo se ve la obra que se está creando, se visualiza el panorama completo y Jay-Z ha demostrado, una vez más, que él no solo concibe la melodía y las letras cuando se trata de lanzar un álbum. Las imágenes, los vídeos, los recuerdos también forman parte de este todo llamado música.

 

El 30 de junio el rapero presentó en Tidal, la plataforma de música de la que es socio fundador, su nuevo disco 4:44. El material iba acompañado de un vídeo de ocho minutos en el que entre otros, aparecía la actriz Eartha Kitt hablando de amor, pequeños clips de él junto a Beyoncé en conciertos y pequeños extractos de vídeos aleatorios. 

 

En el material audiovisual presenta una serie de entrevistas en las que sus protagonistas hablan de la masculinidad, el amor, las relaciones con mujeres. Pero como este disco va de perdón, el músico se disculpa conBeyoncé por su infidelidad, y aprovecha para hablar de su parte más íntima. 

 

«Esta es mi vida verdadera. Yo solo corrí hasta aquí y construimos esta gran, hermosa mansión de una relación que no estaba construida al 100% de verdad, y se empezó a agrietar», reconoce Jay-Z.

Y aunque acaban de convertirse en padres por segunda vez y por partida doble, el músico confiesa que ha sido muy duro y muy difícil. “Llegamos a un punto en el que dijimos: ‘Vale, tiremos todo esto y volvamos a comenzar desde el principio’… es lo más difícil que he hecho nunca”, revela.

 

Durante su intervención Jay-Z alude que luchar por su matrimonio fue incluso más complicado que crecer en pisos de protección oficial, como Marcy Houses, en Nueva York, y haber recibido un disparo.

 

(Globovision)

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