El presidente ruso, Vladimir Putin, se mostró «satisfecho» de su conversación telefónica con su par estadounidense Joe Biden el jueves, pero advirtió del «error colosal» de nuevas sanciones a Moscú que podrían llevar a una «ruptura completa» en sus relaciones.

La discusión fue «franca» y «concreta», dijo a la prensa el asesor diplomático del Kremlin, Yuri Ushakov, al final de la reunión, que duró unos 50 minutos.

Durante la llamada, según Ushakov, Biden advirtió de la imposición de fuertes sanciones contra Moscú si seguía la escalada de tensión en Ucrania, donde se teme una invasión de Rusia tras el despliegue masivo de tropas en la frontera.

Putin alertó que estas medidas podrían conducir a una «completa ruptura» de los vínculos entre Rusia y Occidente, señaló este asesor en rueda de prensa.

«Esto sería un error colosal que podría llevar a consecuencias graves, las más graves. Esperamos que no ocurra», añadió.

Los dos presidentes discutieron de la creciente tensión sobre Ucrania en una charla que debe allanar el camino a una negociación formal programada en enero.

Ushakov dijo que Putin estaba «satisfecho» de la llamada, pero que advirtió a Biden de la necesidad de un resultado positivo para Moscú en las próximas conversaciones sobre seguridad, que no podían durar indefinidamente.

«Necesitamos un resultado, y seguiremos insistiendo en un resultado de forma que se garantice la seguridad para Rusia», dijo Ushakov en rueda de prensa.

Este mes, Rusia lanzó una serie de exigencias para resolver las tensiones en Ucrania, que incluían garantías de que la OTAN no se expandiría más hacia sus fronteras y de no construir nuevas bases militares estadounidenses en los países de la antigua Unión Soviética, que Moscú considera su zona de influencia.

«Las negociaciones no deben convertirse en un hablar por hablar», dijo Ushakov, que no detalló el marco temporal que se plantea el Kremlin en esta cuestión.

Según este asesor ruso, el Kremlin estudiará la situación tras la ronda de negociaciones que empezarán en enero en Ginebra, Bruselas y Viena entre Rusia, Estados Unidos, la OTAN y otros países occidentales.

«Entonces sacaremos conclusiones», señaló.

(AFP)