El Ministerio de Relaciones Exteriores de Argentina emitió este martes un comunicado, en respuesta a las “amenazas beligerantes” y “referencias denigratorias” hacia su país expresados por el secretario de Defensa del Reino Unido, Ben Wallace, acerca de las islas Malvinas.

“Los Gobiernos democráticos argentinos han consolidado su reivindicación de la soberanía sobre la Cuestión Malvinas en el marco del derecho internacional y por la vía pacífica y diplomática, por lo que las referencias del secretario Wallace resultan absolutamente impropias e inaceptables”, recalcó la Cancillería.

De hecho, Wallace, en declaraciones difundidas por el periódico local Daily Telegraph, ratificó el domingo la determinación de Londres para “hacer frente a los matones, defender a los que no pueden defenderse a sí mismos y a nuestros valores”.

Al rechazar categóricamente esas afirmaciones que el titular británico formuló en un acto para recordar los 40 años del conflicto bélico de las Islas Malvinas, la Cancillería argentina avisó que tales retóricas son “incompatibles con la relación diplomática existente” entre los dos países.

En esta misma línea, el Gobierno argentino indicó otra vez más que el país europeo “debe dar cumplimiento a las resoluciones de las Naciones Unidas que instan a una solución negociada de la disputa por la soberanía sobre las islas Malvinas, Georgias del Sur, Sandwich del Sur y los espacios marítimos correspondiente.”

De la misma manera, instó al Reino Unido a respetar las normas internacionales que declaran al Atlántico Sur como una “zona de paz y libre de armas nucleares”, además de urgir la desmilitarización de Malvinas.

Desde el año 1833, Buenos Aires y Londres están implicados en una disputa territorial sobre las Malvinas, ocupadas por los británicos. El conflicto causó una guerra de 74 días en 1982, en que murieron 649 soldados argentinos y otros 255 británicos. Desde entonces, Argentina ha reivindicado la soberanía sobre las islas en distintos foros internacionales y ha instado a Londres a negociar para resolver la disputa, a lo que los británicos se niegan.

(HispanTV)